Capítulo 3.

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Alexa POV

Diez años atrás...

Luego del robo en la casa, todo fue bien, no atraparon a nadie. Todo estuvo tranquilo la semana siguiente. Tuvimos una fiesta, conocí a Evan, creo que ya lo había visto, pero no tengo muy presentes esos recuerdos. Supe que va a la misma escuela que yo. Él está un año más arriba que el mío por eso es que no lo había visto antes. Luego de pasar una increíble fiesta juntos, nos estuvimos todo el tiempo que podíamos juntos en la escuela. Evan me pidió que saliéramos en varias ocasiones y yo aceptaba. Yo me sentía extrañamente bien con él, hacía que me la pasará muy bien, me hacía reír, me hacía sentir viva.

Pasaron varios meses, hasta que Evan llegó un día con la triste noticia que tenía que regresar a Miami. Algo dentro de mí se apagó al escuchar eso. Tuvimos una larga y triste despedida. Algo dentro de mí se rompió cuando nos separamos.

Luego de que Evan se fuera, seguimos en contacto, hasta que paso algo y él ya nunca volvió a contestar mis mensajes, ya no contestaba mis vídeo llamadas, ya no supe nada de él.

Él había desaparecido. Creí que no volvería a saber de él...

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Tres años después...

Hoy era mí último día de escuela, ya había acabado la escuela. Me tocaba empezar la universidad, era algo que me tenía realmente emocionada, quería estudiar literatura. Me gusta mucho escribir, leer, analizar textos, me gusta el hecho de que en un libro pueden pasar muchas cosas y siempre queda algo en ti de ese libro. Acabo de cumplir los 18 años, acá en Guatemala ya es la mayoría de edad.

Un día pedí hablar con mis padres, imagínense tuve que hablar con su secretaria para que hiciera como que una cita para que pudiera hablar con ellos, yo siendo su hija, pero bueno no importa. Un día pedí hablar con ellos para decirles lo que quería hacer para la universidad, les dije que me quería ir de Guatemala. Les dije que quería ir a estudiar a Estados Unidos, ellos me dijeron que estaba bien, que les dijera en que universidad y que ellos me la pagarían, me comprarían un apartamento y me mandarían dinero cada mes para que pudiera mantenerme.

Yo les decía que no quería que me mantuvieran, que con que me pagarán la universidad era más que suficiente, ellos por supuesto insistieron, a lo que yo termine accediendo solo para que el poco tiempo que tenía con ellos no lo pasáramos discutiendo.

Así que aquí estaba yo terminando de arreglar mi maleta y todo lo que necesitaba, porque en tres días partía para Miami. Viajaba a Miami, porque estudiaría literatura en la Universidad Internacional de Florida, me habían aceptado. Yo no empezaba clases hasta dentro de cuatro meses, pero tenía que irme desde ahorita para poder arreglar el apartamento que mis padres habían comprado para mí, además que tenía que adaptarme a la nueva ciudad.

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Había llegado el día, hoy me iba para Miami. No voy a mentir, estoy muy nerviosa porque es un lugar nuevo, un lugar lleno de sorpresas, eso hace que me emocione a la vez. Así que soy un desastre de emociones en este momento.

Ya estaba en el aeropuerto, con Lucy y Pedro que eran los únicos que me habían venido a despedir porque mis padres como es costumbre están en el trabajo, me dejaron un sobre con una carta de despedida de parte de ambos con bastante dinero y algunas tarjetas de débito. Era mucho dinero, demasiado diría yo.

Después de una larga y muy sentimental despedida con mis mejores amigos, era hora de subir al avión. Entre al avión, busqué mí asiento, puse mis cosas arriba en el contenedor y me senté. Me puse mis audífonos e iba pensando en cómo sería cuándo llegará. Al aeropuerto me iría a traer unos primos que viven en Miami, ellos me dijeron que podía quedarme unos días mientras me empezaba a instalar y que me llevarían a recorrer la ciudad. La verdad me alegraba saber que no iba a estar sola, porque me sentiría totalmente perdida.

Avenida Escape.Where stories live. Discover now