Capítulo 9: Favores

71 4 4
                                    

A la mañana siguiente....

Desganado, Trunks ya se encuentra listo para ir a la oficina, no había podido conciliar el sueño pues no había dejado de pensar en Maron, le había mandado miles de textos que nunca recibieron respuesta, sin embargo creía que lo mejor era seguir el consejo de su madre... Darle tiempo a que se calmara y volver a buscarla en un par de días. Baja las escaleras sabiendo que por la hora casi todos estarían dormidos, excepto su padre que seguramente ya se habría ido a entrenar a algún lugar lejano.

Dispuesto a hacerse su desayuno y prepararse una larga taza de café, que después de la noche anterior la necesitaría sin duda, ajustó su corbata y entró a la cocina encontrándose con la mesa puesta, había jugo de naranja, huevos con tocino, pan tostado con mermelada y por supuesto el café que tanto anhelaba.

-Buenos días Trunks- saludó con un abrazo y una gran sonrisa la chica con cabellos de fuego, quien portaba nuevamente el vestido ahora limpio que había usado la noche anterior que la hacía ver hermosa y elegante.

Trunks solo respondió con una media sonrisa nerviosa.

-Toma asiento, tu desayuno está listo- lo jaló del brazo y le hizo sentarse –Espero te guste, lo hice con mucho amor especialmente para ti- le decía poniéndole una servilleta en el cuello de su camisa y posteriormente entregándole un periódico para que lo leyera mientras comía, dejando a un Trunks confundido y sintiéndose como en una película de los 50's.

-Anda pero ¿porque me miras así?- Preguntó poniendo en su mano una taza con su café favorito, al darse cuenta que el la miraba como un bicho raro.

-Ren, son las 6 de la mañana deberías estar durmiendo...- dio un sorbo a su taza de café -¿A qué hora te levantaste?- pregunto el pelilila.

-Eso no tiene importancia, aquí lo importante es que te alimentes bien, para que estés sano y fuerte- decía la chica sentándose en la silla frente a él y observándolo comer como si eso fuera lo más entretenido del mundo.

-No debiste... quiero decir no es necesario que hagas esto por mí- Decía el joven con su boca llena de comida mientras ella solo sonreía....

-Trunks, sobre anoche- bajo la mirada nerviosa.

-La verdad no quiero hablar de eso Ren-

-Bueno es que yo solo quería disculparme por lo que pasó, por haberte avergonzado en la fiesta y por lastimar a tu novia literalmente en todos los sentidos- Al verla tan avergonzada y con los cachetes inflados le causó mucha gracia, había olvidado que Ren a veces solía actuar como niña pequeña y es que aunque aparentaba mayor edad por sus atributos físicos, tan solo tenía 17 años.

-Bueno, creo que ese jalón de cabellos fue demasiado, una dama no debe prestarse a eso- expresó haciéndose el maduro e interesante –Pero disculpa aceptada- dijo comiendo su pan tostado e iluminando el rostro de la chica.

De repente una alarma sonó.

-¡Mierda!... debo irme...- expresó antes de literalmente vaciar en su boca lo que restaba de comida del plato, tomar su taza de café caliente lo cual le hizo sonrojarse del calor y jalar su saco, para salir corriendo como acostumbraba.

-Espera- la pelirroja lo detuvo antes que saliera de la puerta. –No olvides tu almuerzo- le decía ella al tiempo que se para de puntitas y deposita un beso en la mejilla del saiyajin, haciendo que este se sonrojase y se le erizara la piel. Ella coquetamente le guiña un ojo mientras que ponía en sus manos un par de cajas con comida, Trunks realmente estaba sorprendido –Anda vete ya, que no quiero que me culpes por llegar tarde- le enseño la lengua y el joven aun sonrojado reacciono, lanzó una capsula al aire y de prisa se subió en una nave que volando lo llevaría a la Corporación Capsula.

Mi ex esposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora