Capítulo 3

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Samantha Sharpe estaba bebiendo té. Y Samantha Sharpe no era feliz.

Su padre y su nueva mujer, Poppy, estaban tomando té en el comedor formal de la casa familiar de los Sharpe. Gracias a la boda en fin de año, Poppy era ahora la madrastra de Sam.

Lógicamente, Jackson Sharpe y su nueva esposa deberían seguir en su luna de miel en Barbados. Pero no habían estado en la isla del Caribe ni una noche cuando Poppy se había despertado histérica; se sentía insegura en dejar Beverly Hills y su ginecólogo. Jackson había intentado razonar con ella, al bebé todavía le quedaban ocho semanas. Pero a Poppy le daba igual. ¿y si la exótica comida hacia que el bebé naciera antes? ¿Y si no tenían médicos por si se ponía de parto?

Así que volvieron a Los Ángeles, que era por lo que Sam estaba entablando relación con la nueva adquisición de la familia tomando muffins de naranja y arándanos, scones de frambuesa con nata y papaya fresca.

Poppy amaba el té, Había leído que se servía en el Buckingham Palace. La abuela de Poppy era británica. Para Poppy eso era conexión suficiente con la realeza, así que pidió té diario.

“¡Toda la familia! Esto es tan agradable.” dijo Poppy, y dio un beso volado a su marido, él se lo devolvió.

Sam se tragó su tercer scone. Su madrastra, sin contar con su barriga, parecía una chica Laker. Muy bronceada, piernas que nunca terminaban, mechas rubias, y tetas. Además solo tenía cuatro años más que Sam. Clichés de Hollywood.

Sam, que quería ser directora, solía imaginar que su vida era una película, con música incluida. Su plan era hacer en esta época lo que Scorcese en los setenta. ¿Qué serviría ahora? ¿Algo punk y viejo? ¿I wanna be sedated? No. No Ramones. Se estaban volviendo comerciales. Dead Kennedys, tal vez. Too Drunk to... si su padre se hubiera tomado esa canción en serio. Entonces Sam no tendría que estar pensando en tener un hermanito o hermanita en un par de meses.

Mientras Sam masticaba, Poppy frunció el ceño “Espero que no estés comiendo mucho Sam, porque tenia una amiga que casi muere de eso.”

Unas quince respuestas pasaron por la cabeza de Sam, pero se tragó todas en favor de un neutral “Gracias por compartirlo.”

“Sam... el tono.” dijo su padre.

Aparentemente no era lo suficientemente neutral.

Sam pensó lo sin sentido que era este matrimonio. Siendo la estrella más importante de Hollywood, Jackson podía escoger mujeres. Casi siempre acababa con un rollo, la chica apenas suficientemente mayor para votar que estuviera en su última película. Cuando la película terminaba, también lo hacía el romance. Sam suponía que su padre tenía mucho cuidado con el control de la natalidad, porque si no, con la velocidad con la que cambiaba de novia, tendría suficientes mini-yos para formar su propia liga.

¿qué había pasado con esta chica? ¿Como había Poppy conseguido quedarse embarazada y que Jackson se casara con ella?

Entonces Sam había pensado: ¿Y si el bollo de Poppy era de otra persona? Tal vez se las ingeniaba para conseguir el DNI del niño y hacer la prueba de paternidad. So el bebé no era de Jackson, Poppy desaparecería de su vida.

“¿Qué tal va todo Sam?” preguntó su padre.

AL menos intentaba mostrar interés.

“Bien.”

“Me alegro. Voy al gimnasio, Billy Blanks viene a ayudarme a ponerme en forma.” miró el reloj y se alejó de la mesa. Ella intentó pensar en algo para mantenerle sentado en la mesa el mayor tiempo posible.

“Estoy haciendo un corto, papá. Para el colegio.”

“Genial.”

Ya sonaba distraído. “Con mi amiga Anna, de Nueva York, es muy buena, si quieres conocerla...”

“Ajá.”

“una especie de Gatsby conoce a Fellini, conoce a la gente tipo Beverly Hills. Así que necesito dar una fiesta, probablemente el sábado por la noche, y grabarla.”

“¿Sábado?” dijo Poppy.

“Sí, Poppy,” dijo despacio Sam “Ya sabes, el día después del viernes.”

“Me refería a que las renovaciones comienzan ese fin de semana. Así que una fiesta es imposible.”

Sam se giró a su padre “¿renovaciones?”

“Le dije a Poppy que podía hacer lo que quisiera con la casa. No se siente como en casa aquí, y quiere preparar una de las habitaciones de arriba para el bebé. La que está al lado de la tuya, de hecho.”

Sam se imaginó el sonido de un bebé llorando a las tres de la mañana “Creo que la que casa está bien,no necesitamos redecorar, bueno, tal vez algo de insonorización.”

“Cariño, te vas a la universidad el próximo año. Ni siquiera estarás viviendo aquí. Pero nosotros sí” dijo su padre dándole un beso en la frente a su nueva esposa. “Sam lo siente, Poppy. Necesita un poco de tiempo para ajustarse a su nueva vida.”

“He quedado con mu entrenador de la vida para pensar en nombres para el bebé, había pensado Chrysalis si es una niña. ¿no es bonito? Luego quedé con Nicki Minaj, igual hacemos un disco juntas.”

“Genial, amor,” dijo Jackson distraído mientras se miraba el pelo en el espejo que había en la pared.

“Poppy, Nicki Minaj tiene varios número uno ¿porqué iba a hacer un disco contigo?”

“Tu padre lo organizó. Resulta que puedo cantar.”

eso era el colmo.

No podía estar tanto tiempo sentada y escuchando a la cabeza hueca pretender que había algo más para ella aparte de casarse con un ganador de un Oscar. Sam se levantó dijo que tenía tarea y subió las escaleras.

Tenía que confiar en la prueba de paternidad

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