Vida Adolescente

Donde todo comenzo

Y ahí estaba yo, una chica de 15 años con la desesperación de no saber como calmar el dolor que aquel chico al que yo quería tanto me había provocado. Pase días deprimida por aquel motivo, no podía aceptar lo que me había pasado, no quería creer lo que el hizo.
Necesitaba desahogarme y decidí salir a caminar para poder despejar mi mente escuchando alguna música que pasara por mi móvil.
Era un día bastante frió y nublado como para andar rondando por la calle pero eso no me importo en lo mas mínimo, simplemente quería olvidar todo el daño que el me había hecho, todo el sufrimiento y dolor que me había provocado el chico al que yo quería con todas mis fuerzas.

TIEMPO ATRÁS

Mi grupo de amigas que nos hacemos llamar "Seven Friends" me comento que este fin de semana había una fiesta y acordamos en ir juntas. Al fin acabo la semana y llego la fiesta. Ya todas juntas en la fiesta nos empezamos a divertir pero nos ofrecieron licor, yo lo rechacé completamente porque a mi no me gustaba para nada y me senté a un lado. Estaba sola pero tranquila, en eso un chico se me acerca.

-Hola
-Hola
-¿Como te llamas?
-Fiorella, y ¿tu?
-Jorge, un gusto - dedicándome una agradable sonrisa - Oye, que te parece si bailamos en ves de que estés aquí sentada, sola y aburrida.
Acepte sin problemas ya que el estaba en razón, me estaba aburriendo sola.
Estuvimos bailando durante varias canciones, comentando sobre nosotros mismos y riéndonos de nuestras propias torpezas. Al comentar nuestras edades me di cuenta de que Jorge era un año mayor que yo pero íbamos en el mismo año por su fecha de cumpleaños. De repente me pidió el numero de mi móvil y dude por un momento pero a fin de cuentas que perdía, se lo di y el me dio el suyo; hicimos los mismo con nuestras redes sociales y demás cosas que parecían ser innecesarias en su momento. Nos divertimos mucho y sin darnos cuenta había terminado la fiesta.
Se ofreció a acompañarme de camino a casa y no pude rechazarlo. Durante el camino me propuso volver a encontrarnos y estuve de acuerdo. Ya llegando a mi casa lo miraba de reojo y me fijaba en que me veía mucho. Llegamos a mi casa y nos despedimos.
A la mañana siguiente me desperté algo tarde para el colegio como siempre suele pasarme y tuve que arreglarme lo mas rápido que pude. En el camino me encontré con Jorge al que salude rápidamente, estaba algo avergonzada por tan fatal aspecto que tenia y me puse colorada pero se rió de una manera delicada que no me molesto. Tuve que despedirme inmediatamente porque se me hacia tarde para el colegio y eso no era bueno para mi ya que yo soy la presidenta de la clase desde hace muchos años.
Ya en el colegio tuve que lidiar con el profesor de Química para que no me regañara por llegar tarde a su clase y cuando ya estaba sentada en mi asiento mis amigas me vieron de una manera que querían que les contara lo que paso la noche anterior, durante el recreo les conté todo lo que paso y gritaron tanto de la emoción que me dejaron sorda, pero a Andrea no le agradaba la idea y me advertía que tuviera cuidado con el.
Luego de tanta espera llego el día en el que nos volveríamos a encontrar, no podía esperar mas y fue tan maravilloso como lo había imaginado. Jorge es todo un caballero, respetuoso y admirable. Nos comimos unos helados para luego ir a un parque de diversiones en el que nos divertimos tanto que no nos percatamos de la hora. Ya era el momento en que tenia que irme a casa y Jorge me acompaño.
Ya en la puerta me voltee para despedirme pero Jorge me miraba muy fijamente que me sonrojaba. Me acorralo contra la pared sin dejarme escapatoria creando un muy pequeño espacio entre nosotros en el que apenas se podía respirar por si mismo.
-Fio... t...tu me gustas - dijo acabando el poco espacio que quedaba entre nosotros.
-Recién nos estamos conociendo Jorge... - dije muy nerviosa sintiendo su respiración a milímetros de mi.
Se acercaba un poco mas en cada momento hasta que voltee la cara para evitar el beso que quiso darme. El solo sonrió.
-No creas que me daré por vencido así de fácil.
Sin saber que hacer solo reí de los nervios y se despidió con un cálido beso en mi mejilla.
Entre a casa y no podía creer lo que acababa de pasarme. *¿seria solo un sueño? ¿me lo imagine todo?* pensaba....
Pasaba el tiempo, nos seguíamos comunicando y saliendo en distintas fechas. Ya pasado mas de un mes llego su cumpleaños, cumplía 16 años, y salimos caminando por un parque con poca iluminación en la que nos sentamos en una de las tantas bancas que había. Me miraba muy fijamente y eso me ponía muy nerviosa.
-¿Que? ¿A caso tengo un bicho en la cara?
-No es nada de eso, es solo que eres muy hermosa - dijo muy coqueto
-Mira que cosas dices... - rió algo colorada
-Fio....
-Dime
-Quiero preguntarte algo - bajando la mirada
-Claro dime
-¿T...tu quieres ser m...mi novia?
No podía salir de mi asombro hasta que una ligera brisa hizo articular una palabra de mis labios.
-¡Siiii! - grite muy emocionada
Me cargo dándome una vuelta en el aire y al bajarme me abrazo por la cintura para luego darme un beso. Un dulce y cálido beso del que nos fuimos separando lentamente por falta de aire.
Estaba muy feliz y contenta de que pudiéramos estar juntos. Pasaban los meses y seguía enamorada de Jorge, mi novio.
Un día, una de mis amigas nos invito a una fiesta pero yo rechacé la invitación porque no podría ir a causa de falta de tiempo pero Jorge no dijo nada, estaba con una mirada neutra.
Después de aquella fiesta una chica que no me hablaba antes, me habla, para decirme que mi novio estuvo bailando con una chica aquella noche, no lo creí y lo olvide.
Al día siguiente salí con Jorge pero algo había cambiado en el y no lograba entender lo que era. Pasaban los días y el seguía así. No le tome mucha importancia hasta el día de mi cumpleaños, el día en que cumplía 15 años.
Le hable para encontrarnos en el parque en el que nos hicimos novios y así poder hacer que sea algo mas romántico, el acepto. Ya era mi cumpleaños, fui al parque donde acordamos para vernos y lo espere, pero el no aparecía por ningún lugar; le llame al móvil muchas veces pero fue en vano ya que no contesto ninguna de mis llamadas.
Ya resignada pensando que no iría decidí regresar a casa pero en el camino lo vi a el, fui hacia el para abrazarlo pero vi a una corta distancia que se encontró con una chica, llegue a pensar que seria su prima hasta que de repente se besaron y se separaron al momento en el que Jorge me vio, la chica solo me miro y sin darme cuenta una lagrima desbordo de mis ojos cayendo sobre mi rostro.
-Fiorella - Me dijo Jorge muy impactado