Capítulo 25: Juego de Seducción.

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Notas de la autora: escrita años atrás.

Hola! Como están mis queridos lectores??!!! Estoy muy emocionada por presentarles este nuevo capítulo. Y saben por qué? Porque dentro de poco se cumple un año de esta historia. Pueden creerlo? Sí, el 28 de septiembre publiqué Quiero ser tu Apoyo, por primera vez y es mi primer fanfic Superbat. El escribir terminó siendo una obsesión y comencé a relatar mucho sobre ellos. Así que la siguiente actualización será para festejar el aniversario! Wiiiii jejeje, bueno... antes de que vengan los momentos de tensión, los dejo con la lectura para que disfruten del amor que se tienen estos dos.

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Con cada paso que Bruce daba hacia la habitación, la niña en sus brazos se iba durmiendo poco a poco, abatida por el día largo y el cansancio propio de su corta edad. Al entrar y acercarse a la cama, la respiración de Abie era lenta y profunda, señal que había conciliado el sueño en cuestión de segundos. El señor de la noche la recostó y la tapó con afecto para luego acariciar su mejilla dulcemente por unos instantes. El ruido de los pies de Clark entrando en la habitación hizo que se detuviera, se irguió para mirar a la niña con tristeza y luego cerró sus ojos con angustia. Al notarlo, Clark se acercó a su pareja suavemente desde la espalda y lo rodeó para tomarlo entre sus brazos. El cálido apretón hizo que el corazón de Bruce, dolido por los recuerdos del pasado, se aliviara en ese instante de una manera sorprendente. Ese afiance fuerte y lleno de cariño le hizo olvidar, aunque sea por unos instantes, la cruel realidad de la corrupción, ambición y odio en el mundo; realidad que termina llevándose incontables vidas y arruinando la infancia de tantos niños. Cada día, hechos parecidos al suyo o al de Abie, lo convencían que su cruzada era el camino correcto a seguir para tener un mundo mejor; aunque pareciera a veces ser interminable.

Después de largo rato permaneciendo así, en silencio, Bruce abrió sus labios para susurrar:

—Sonríe todo el tiempo, pero sé que detrás de esa sonrisa se esconde un gran dolor. Le tomé cariño a pesar que apenas la conozco, y siento que ella también siente lo mismo hacia mí. Creo que formamos este vínculo tan fácilmente por la similitud de nuestras historias. —Tomó los brazos que lo rodeaban para sentir más cerca el calor del agarre y recostó su cabeza sobre el hombro del reportero.

El corazón de Clark bombeó con fuerza, le parecía raro ver a Batman actuar así, pero sabía que toda esa historia, tan similar a la suya, era la razón de que se sintiera así. A pesar de la triste situación, Superman apreciaba que su pareja se abriera a él como lo estaba haciendo. Recordaba que antes, cuando algo lo llevaba a situaciones de su pasado, Bruce solía dedicarle un gruñido molesto seguido de indiferencia. Ahora, se entregaba al cariño de sus brazos para reconfortarse, logrando relajarlo y tranquilizarlo.

Con una cara llena de amor, Kal-El se acercó a su oído y le susurró—: Abie es fuerte, Bruce. Lo superará... tal como lo has hecho tú. —Colocó su mentón en la unión del cuello y el hombro y llevó sus manos hasta el abdomen para rodearlo de la cintura y estrecharlo más.

Batman exhaló una pequeña risa con ironía y luego de un suspiro acotó—: Creo que yo no lo superé muy bien que digamos. —Alzó la comisura de su boca en una mueca tratando de formar una sonrisa que le fue imposible sostener.

—No digas eso, Bruce, eres uno de los mejores hombres que conozco. Has sabido superar lo de tus padres a tu manera. Ella encontrará la suya. —Apoyó sus labios sobre el cuello y le dedicó un dulce beso—. Salgamos de aquí y vamos a ducharnos, estás empapado y el agua caliente nos relajará. —Lo hizo girarse suavemente para tenerlo de frente y sostuvo delicadamente su rostro entre sus manos para calentar su fría piel.

Los párpados de Bruce se cerraron por un momento disfrutando de la calidez que le brindaba su novio y al abrirlos habló desviando la vista—: Estoy cansado. Quizás sea mejor cambiarnos e irnos directamente a dormir. —Tomó sus manos, les dio un suave apretón y deslizó gradualmente sus dedos del agarre para luego encaminarse a la salida.

Quiero Ser tu Apoyo (Superbat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora