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Los pasillos de la escuela estaban inundados extrañamente en una algarabía que más que ser interpersonal, estaba comprometida a divulgar un rumor. Y quizás no uno cualquiera. SaeGuk había dejado claro ahora que ya nadie se metía con él, eso llevaba oyendo desde que cruce las puertas, el menor con mejillas abultadas y aspecto infantil junto a mi era el encargado en hacer firme ese hecho; y las voces de fondo no hacían más que remarcarme la veracidad de sus palabras. Pero saltaba e ignoraban una parte importante por contar. ¿Qué era eso que había hecho SaeGuk? Y más intrigante aún, ¿a quién?

-Park, ya. Deje de ponerte atención desde que hablaste de las dos chicas que conociste en no se donde y que su novio estuvo a punto de patearte las bolas.-

-Sólo pone atención a lo que quiere ¿no hyung?-

- ¿A que más si no es así? -

El chico a mi lado resoplo fastidiado de mi actitud. Pero era él quien se había acercado primero con la excusa de que estar ausente dos semanas necesitaban una actualización de las cosas en la universidad. Y me estaba cansando que últimamente todo giraba en torno al idiota de SaeGuk. Mi madre jodiendome hasta en mis ratos libres para que por favor tenga un poco más de paciencia. No debería tenerla con una especie de ser vivo como él.

-Pobres sujetos. Llevan todo este tiempo siendo el saco de boxeo de esos tres. A uno de ellos creo que lo mandaron al hospital, me parece que fue el mismo que te llevo a la enfermería aquel día.- mi sangre se heló y detuve mi andar.

Nadie debe tocarlo. No a él.

- ¿De quienes hablas?- mi compañero me miró con la duda palapable en cada centímetro de su rostro - ¿De quienes estás hablando JiMin?- pregunté esta vez más angustiado.

-De un chico de primer año, y otro de mi curso. Ambos son raros, jamás les vi estar juntos hasta que SaeGuk les hizo el "favor" de juntarlos solo para humillarlos. Lo peor es que los directivos hacen como si estuviesen ciegos.-

- Nombres, enano. Dame nombres.- lo sujete de la chaqueta mientras la cabeza me punzaba por pensar en el peor de los escenarios.

-Al de primer año le dicen Kook, al otro sólo he escuchado que lo llaman invasor u otros apelativos nada agradables. Ahí está el menor- señaló a las escaleras.

Un cuerpo delgado cubierto por una sudadera al menos dos tallas más grande, de cabellos negros y complexión bastante delgada y atormentada hacia su aparición por el pasillo. Todo se sumió tan rápido en un silencio que me cortó la respiración. El chico mantenía la cabeza baja tratando por lo que fuera pasar desapercibido. Y no lo logro, KyuHae apareció de la nada tacleando el débil cuerpo de aquel chico, había caído justo como si de un árbol recién talado se tratara. Una exclamación conjunta de pánico fueron como una ovación a sus acciones, se creía en la cima del mundo por haber golpeado a un chico tres años menor que él. Todos les hicieron espacio, más que nada para no salir lastimados, pero nadie se fue, y nadie hacia lo mínimo por ayudarle. SaeGuk y el otro tipo aparecieron después, ambos cargados con una actitud de soberbia extrema que me resultaba en demasía molesta. Algunas chicas soltaban gritos que eran silenciados por sus propias manos, aún sin quitar los ojos de aquel chico tendido en el suelo tratando de ponerse de pie; otros, los más cobardes, preferían pasar de largo. JiMin y yo sólo observábamos. Sólo yo.

- Deja de meterte con chicos que no tengan que ver con tu problema emocional. Ya sabemos, más de media institución hace conocimiento de ello, que tus padres no te prestan el más mínimo grado de atención. - me sorprendió ver a mi amigo ayudar a alguien que no fuese a una chica -no te desquites con quien no es responsable de tus "desgracias"-

- No te metas pesadito. Aquí no hay nada para tu enorme bocota.-

Fue sorprendente. La velocidad en la que el puño de JiMin hizo contacto con el ojo de KyuHae, y el como este quedo tendido en el piso totalmente desorientado, fue sorprendente. Me provocó la clase de escalofríos que no anticipaban a nada bueno. JaeWoo estaba a punto de arremeter en contra de mi amigo cuando una de las subdirectoras hizo acto de presencia. La población estudiantil desapareció igual de rápido que se me hizo insano. Ni siquiera me dio tiempo de escuchar cuales serían las consecuencias.

52blue🐋 ‹ yt ›Donde viven las historias. Descúbrelo ahora