One step from heaven to hell.

"Dos"

Escucho el sonido de la alarma, sigue siendo igual de insoportable que siempre, quizás, incluso más, me incorporo para apagarla pero miro mi habitación, da asco, toda llena de pañuelos, el aire es denso y caliente, insoportable para estar en invierno, cierro los ojos un momento y recuerdo las palabras que me decía mi abuelo;

'Sonríe, pase lo que pase hazlo, solo tenemos una vida, nada vale suficiente la pena como para desperdiciarla con lágrimas.'

Quizás tenía razón, quizás tengo que pasar página, él está bien ahora, no puede sufrir, limpio la lágrima que recorre mi mejilla y me levanto, subo la persiana dejando entrar los rayos del sol, me miro en el espejo y niego, estaba horrible, ojeras de tres pisos, el pelo enmarañado, recogido en un moño, las mejillas rosadas y mi pijama de conejitos, demasiado infantil para mis 17 años, miro a la mesita y veo una nota;

'Alice, papá y yo hemos salido a hacer la compra mensual, ya sabes, al pueblo de al lado, volveremos a la noche, abajo tienes dinero, pidete algo chino o lo que quieras, te queremos.
Mamá.'

Suspiro dejandola a un lado, muerdo mi labio y bajo, para escuchar el timbre, cierro los ojos y abro, miro a Dylan, sin decir nada, me mira en silencio, un silencio algo incómodo, y entonces lo rompe.

-Tenemos que hablar. -Le miro, quiero negar y cerrarle la puerta pero no puedo, es evidente que le quiero, y el lo sabe, pero sigo sin decir nada.-

-Alice, creo que deberíamos darnos una segunda oportunidad, te prometo que he cambiado. -Realmente quiero, quiero volver a besarle, quiero sentir como sus brazos me rodean y me dice que me quiere, pero no le creo, a pesar de todo, no lo hago.-

-No puedo.. Dylan.. Ahora estoy en un momento difícil.. Y yo, lo siento, pero no te creo, lo siento, de verdad.. -Le miro, las mejillas se le han rosado y agarra mi mano, le dejo, me gusta sentirme en contacto con él.

Dylan hace ademán de hablar pero alguien le interrumpe, abro los ojos, ¿Louis? ¿El chico del parque? ¿Qué hace aquí? O me mejor dicho, ¿Cómo me ha encontrado? No sé como reaccionar pero instintivamente suelto la mano de Dylan y miro a Louis, que rompe nuestra conversación.

-Alice -Sonrió, sonrió de la misma manera con la que consiguió hacerme sonrojar en el parque, me mira esperando un saludo, pero no lo hago y por ello continua hablando, sin prestar atención a Dylan-. Se te cayó la cartera en el parque, supuse que querías recuperarla, tranquila, no he cogido nada, está todo ahí.

Y me la entrega, la cojo y le sonrío levemente, con una de esas sonrisas que no expresan nada.

-Gracias.. -Veo como Dylan frunce el ceño y le dedica una mirada de desprecio, ¿Quién se cree que es para mirarle así? Fulmino a Dylan con la mirada.

-Eh.. Veo que interrumpo algo así que.. Me voy a ir pero dentro de la cartera hay un papelito con mi número, si quieres volver a insultarme en el parque, llamame -Ríe y mira a Dylan, le dedica una sonrisa y se va, no puedo evitar sonreír y seguirlo con la mirada hasta que desaparece entre la multitud.

-Y.. ¿Se puede saber quién es ese tío? -Frunzo el ceño, ¿Está.. Celoso? Esto es increíble, no puedo creer lo que estoy viendo, ayer preocupado y hoy celoso, no puedo evitar sentirme bien, hacía mucho que no veía a Dylan así, habíamos estado saliendo 3 años y solo lo había visto así un par de veces, no era él precisamente el que lo pasaba mal en la relación.

-Es.. -¿Qué es? No es nadie, realmente no lo es pero creo que me gusta ver a Dylan celoso, por lo que opto por mentirle, es una mentira piadosa, nada malo-. Es un amigo, un amigo.. Especial.. -Farfullo y le miro, la cara se le ha puesto roja y creo que tiene los puños apretados-.

-¿Un amigo especial? -Bufa, se está conteniendo, adoro verlo así, me siento.. deseada, sí, por un momento me he sentido así-. Y si es un amigo especial, ¿Por qué no tienes su número?

Mierda, muerdo mi labio, como ya todo el mundo sabe, no se me da bien mentir pero rápidamente me invento algo.

-Se ha cambiado de número.. Además, ¿Qué más te da quién sea? No te incumbe Dylan, dejame en paz.. Quiero desayunar y despejarme, todo está muy reciente.. -Miro al suelo y de un momento a otro estoy entre sus brazos, no sé como a pasado pero ahora estoy llorando, ese es el tipo de abrazos que necesitaba, y me aferro a él, lo hago como si tuviese miedo a perderle.

Sin darme cuenta de como a pasado ahora estamos en el sofá, abrazados, he vuelto a caer, le miro como el primer día, recuerdo perfectamente como le conocí, solo tenía 14 años, era una niña pequeña, el tenía 16, pero por una razón u otra le gusté, chocamos y se me cayó todo, tres años después me engañó y un par de meses más tarde aquí estábamos, abrazados, mirandole como una tonta enamorada, se me escapan algunas lagrimas, no sé como pero se ha dado cuenta, me mira.

-Alice.. -Limpia mis mejillas y se acerca a mi-. Te quiero.. -Me besa, y no sé que pensar pero le beso, le beso con esas ganas acumuladas de dos meses y lloro, no estoy segura de si es por mi abuelo o porque sé que estoy cayendo y que me volverá a hacer daño, pero aún así sigo.

Son las siete de la tarde, abro los ojos y le miro, está a mi lado, dormido, tapo mi cuerpo desnudo, ha vuelto a pasar, pero esto me gusta, me he despejado y adoro de la manera en la que Dylan me toca cuando hacemos el amor, me abrazo a él y espero a que se despierte, aunque ahora no puedo evitar pensar en Louis, miro mi cartera y cierro los ojos, quizás mañana..