Capítulo 26-Accidente

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Lauren despertó al notar la luz del sol en su cara, se estiró y ahí fue cuando notó unos brazos sobre su cintura. Abrió lentamente los ojos para encontrarse directamente con la cara de su hermosa morena; sonrió y comenzó a admirar el cuerpo desnudo de esta. La piel apiñonada, nariz recta, labios rosas pronunciados que la atraían cada vez que los miraba, sus largas pestañas y delineadas cejas, ese gran trasero que tenia, en fin todo era perfecta en ella.

Se acercó a besar la mejilla de su novia y esta sonrió aún con los ojos cerrados.

-Deja de observarme- dijo la morena mientras enterraba su cabeza en el cuello de su novia y planteaba un beso en esté.

-Buenos días babe-sonrió la ojiverde.

-Buenos días -respondió la morena abrazándose al desnudo cuerpo de su ojiverde.- ¿Qué hora es?-preguntó.

-No lo sé-le respondió Lauren sonriendo. -Amaneciste más hermosa de lo normal, lo atribuiré a que dormiste con la segunda mujer más bella en el mundo-jugueteo la mayor.

- ¿A sí?-pregunto Camila- ¿Y quien es la más bella entonces?-siguió está.

-Pues tu- respondió Lauren susurrándole al oído y provocando un estremecimiento en su morena.

- Tenemos que regresar- resopló Camila al ver la hora y abrazando más fuerte a su chica.

- Tu mamá me va a matar-habló sería la ojiverde- le dijiste que regresaríamos rápido y ya amaneció- dijo, comenzando a ponerse nerviosa.

-Tranquila-exclamó la morena- yo le pedí permiso para pasar la noche contigo-le informó- ahora levanta ese gordo trasero que tenemos que ir a casa-le informó mientras se dirigía al baño totalmente desnuda.

Lauren se mordió un labio al ver el cuerpo de su novia; después de salir del shock inicial comenzó a buscar su ropa para vestirse rápidamente y partir a la ciudad. Una vez en ella la chica menor de edad se dirigía hacia su casa.
A dos cuadras de su casa Lauren se bajó del auto, no sin antes darle un gran beso a su novia.

Al llegar a su casa y abrir la puerta encontró a su padre sentado en el sofá mientras usaba su celular.

-Hola Pá -saludo la rubia esperando un saludo de regreso; algo que no llegó, su padre mantuvo las mirada en el celular sin mirar a la ojiverde, esta se encogió de hombros y se dirigió a su cuarto.

Al pasar junto a su padre este la retuvo sujetándola del brazo.

-¿Qué rayos significan esos moretones en tu cuello?-Preguntó el señor apretando con más fuerza el brazo de su hija.

-Nada, algo me pico en la casa de Lucy -respondió la rubia, deseando que su padre la dejará ir.

-No soy tonto Lauren, dime ¿quién chingados te hizo eso?-comenzó a cuestionarla- ¿Con quien te acostaste anoche?-preguntó enfurecido.

-Suéltame-pidió la rubia- suéltame, por favor- rogó.

- ¿Acaso tuviste sexo con ese muchachito del que tu madre siempre habla?-le dijo sacudiéndola.

-!No!-le gritó- ¡el no me gusta!-exclamó.

-¿Entonces con quien pasaste la noche?-pregunto aflojando un poco el agarre del brazo de la rubia.

-!Con mi novia!- gritó exaltada mientras lograba liberarse de el agarre que su padre ejercía en su brazo.- Pase la noche con mi novia -le dijo un poco más calmada.

Su padre se quedó serio y Lauren aprovechó para correr a encerrarse a su habitación. El silencio se adueñó de toda la casa después de la confesión de Lauren.

En cuanto la realización de haber salido del closet frente a su padre la golpeó, se dio cuenta que había dado un gran paso; no sabía como su padre se tomaría la noticia pero ella sentía como un peso se había liberado de sus hombros.

Se escucho un portazo y seguido de esto un auto encendiéndose y arrancando a toda velocidad. La rubia decidió que no era buena idea permanecer en su casa; tomó su maleta de karate, ropa limpia y las llaves del dojo. Encontró las llaves de su motocicleta pero ningún casco así que salió a toda velocidad sin ninguna protección en caso de tener un accidente.

Aceleró a toda velocidad por el malecón; comenzó a llover así que trato de disminuir la velocidad para no perder el control sobre la motocicleta, pero ya era demasiado tarde.

Un automóvil tapó completamente su carril, Lauren frenó bruscamente para evitar estrellarse pero no contó con que la motocicleta derraparía por el mojado pavimento.

La ojiverde salto instintivamente pero a la hora de aterrizar se golpeó fuertemente la cabeza contra la acera dejándola inconsciente en el pavimento; segundos después la moto se estrelló contra el auto que anteriormente había provocado el accidente. Como sí el clima supiera que había ocurrido un accidente comenzaron a escucharse fuerte relámpagos.

Los que se encontraban paseando por el paseo de la bahía y observaron el accidente llamaron rápidamente a emergencias, pues la joven rubia no recobraba el conocimiento y un hilo de sangre, que se combinaba con el agua de la lluvia, había comenzado a correr de la parte trasera de la cabeza de la ojiverde.

La chica comenzó a recobrar el conocimiento cuando los paramédicos arribaron al lugar, observó como le revisaban sus signos vitales; cuando la trataron de mover para subirla a la camilla soltó un gemido de dolor, ni siquiera sabía que le dolía más en todo el cuerpo.

El dolor le provocó que se empezará a quedar dormida.

-!La estamos perdiendo!- escucho gritar al paramédico que me tomaba el pulso- Aguanta pequeña, eres muy fuerte- fue lo último que escucho antes de desvanecerse. 

Entre el dolor y los gritos a su alrededor recordó los ojos y sonrisa de Camila, para después dejarse atrapar por el agujero negro contra el que luchaba.

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Stay Focus (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora