Guarden Mi Secreto [Terminada]

Epílogo: Algo especial

Una chica azabache corría por el gran parque de París. De lejos le seguían dos chicos, una joven de ojos esmeralda y un niño de ojos amarillos que  intentaban seguirle el paso, aunque sin éxito.

-Argh, ¡Hiciste trampa de nuevo Emma!

-Sólo lo dices porque no ganaste -respondió sacando la lengua-.

-Cállense los dos, ¿han visto como se encuentra mi cabello? Sus jueguitos infantiles ya no me causan gracia.

-Já, madurar es para frutas Zoey. Algún día nos entenderás...

-Y mientras tanto, ya que ese día no ha llegado, continuaré preocupandome por algo realmente importante -Dijo con recelo-; yo. Algo que ustedes, Emma Agreste y André Lahiffe, deberían tener en cuenta.

-Igual, sigues siendo nuestra amiga. Aunque seas una aguafiestas cascarrabias -Habló el oji miel con solemnidad-.

-¡Yo no soy...!

-¡NO. PUEDE. SER!

-¿Qué? -Preguntaron Zoey Kurtzberg y André Lahiffe al unísono-.

-¡El regalo de cumpleaños para Roméo! Oh por Dios, lo olvidé por completo. Tendré que ir a la tienda otra vez. ¿Qué le compro? Necesito ayuda... ¡Ya sé! Su madre, la tía Rose, es amiga de todos nuestros padres, ¡Y tal vez logren contactarla! Así podré saber que le gusta, y... y...

-¡NIÑA CÁLMATE! Primero, respira profundo. Segundo, yo me encargo de el regalo. Las chicas Burgueois tenemos nuestros recursos ¿sabes? Y tercero, ¿en serio piensas ir así a su cumpleaños? Vamos a mi mansión, ahí tengo ropa que te puedo prestar. Chica, tienes un cuerpo perfecto y lo ocultas con esas poleras, y ni hablar de...

-Emmm... ¿Chicas? Aquí hay alguien presente que acaba de recibir demasiada información...

-Como si fuéramos desconocidos. ¿Justo ahora te tienes que poner así? Tu ya sabes hasta la fecha de nuestros periódos -Le retó Emma-.

-Emma tiene razón. Somos como hermanos André, nos criamos juntos, nos cambiaron pañales juntos...

-¡Pero sigo siendo un chico! -dijo André, rojo como el cabello de el padre de Zoey-.

-Olvídalo, yo me llevo a Emma y tú ve con Luis. Mantenlo apartado de la fiesta para que no le espante el novio a su hermana. Él te va a hacer caso. ¡Ah! Y no te olvides de decirle a Charlotta que venga a mi casa A-HO-RA.

-¡ROMÉO NO ES MI NOVIO!

-Por ahora querida, por ahora... -Zoey le guiñó el ojo-.

Mientras Zoey arrastraba a Emma a su hogar, Sérèna Couffaine y Olive Kanté caminaban juntas hacia la Torre Eiffel. La peli negra y la chica de cabellos castaño rojizo habían acordado reunirse con sus amigos Phoenix, Axel y Simon a las 5 en punto, y todavía faltaban 25 minutos.

Las cuatro chicas se cruzaron en los caminos y se saludaron, luego cada dúo continuó su camino, de no ser por Zoey, quien aprovechó la oportunidad para invitar a las dos chicas a su casa, justo antes de la fiesta de Roméo, para maquillarse y arreglarse juntas, prometiendo que sería divertido.

Las dos amigas aceptaron la invitación, y prometieron a la rubia pasar la voz hacia Phoenix.

Emma solamente quería escapar de el "secuestro estético" de su amiga. Ella prefería llevar a André y Olive a una mini competencia de videojuegos, para luego sacar algunas bebidas y hacerlos probar los famosos y deliciosos croissants de su mamá. Después los invitaría a quedarse a dormir en su mansión, e inventarían chistes idiotas y se quedarían despiertos hasta muuuuuy tarde. Ese era su concepto de algo realmente divertido.