Quédate

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He viajado tanto en el interior de las personas, que con el tiempo, he aprendido que no es lo mismo ayer que mañana. Que las dudas son la razón del equilibrio. La culpa, un invento de la soledad. La lágrimas, la causa de una decepción. Y los recuerdos, una postal del pasado.

Con el tiempo, he aprendido que el amor es la escusa perfecta para bailarle a la vida acompañada. La escusa perfecta para saltar el precipicio, y la perfecta para saciar el vacío que otros dejaron.

Y hoy escribo por ti. Mi escusa favorita en la lección que el tiempo me ha enseñado. Y es por eso, que hoy me he levantado con las ganas de saborear el paso de los días. Devolverle a la vida este favor, quiero que el riesgo se vuelva apoderar de nuestros cuerpos, mientras te hablo de volver a intentarlo, mientras te susurro mis ganas, mis ansias, mientras te digo como siempre quédate.

Reflexiona (textos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora