¿Recuerdas? || °•. YoonMin .•°

Interrumpidos.

—¿Poupée, recuerdas el cumpleaños de Jin?

—Claro... Recuerdo uno en específico.

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—Mierda, sólo sigue —susurró con la respiración agitada. A esta altura el que alguien los viera era su menor preocupación—. Yoongi, por favor...

—Ssh... —Selló las quejas del chico con sus labios en un corto beso, evitando así que Jin les escuchara—. Cariño, sólo lo dices porque estás excitado.

Jimin frotó su entrepierna con la del rubio, repartiendo suaves caricias en su pecho desnudo. Definitivamente la piel de Yoongi podía volverse una adicción para cualquiera.

—Chicos, ¿están aquí? —habló Jin. Jimin pensó que Yoongi tenía razón, no era el momento adecuado para esto. El mayor en la habitación los buscaba por haber desaparecido misteriosamente de su fiesta de cumpleaños, y encontrarlos escondidos debajo de su cama en una escena comprometedora no sería un buen regalo, por lo que resignado el castaño frenó todo movimiento y Guardó la compostura hasta que el mayor de todos salió de la habitación.

Soltaron un suspiro de alivio al estar solos en el cuarto, nuevamente, y que Jin no haya sido consciente de las camisas en el piso.

—Nos salvamos —murmuró el castaño acompañado de una pequeña risa.

—Al parecer sí —comentó el rubio de igual forma, haciendo una pequeña pausa para salir de la cama con su compañero—. Vamos a casa.

—Está bien. —Recogió las camisas esparcidas en la habitación, entregándole una a Yoongi—. Si Jin nos ve, finge que estábamos en el baño porque no podía parar de vomitar y ahora me llevas a casa completamente ebrio.

—¿Por qué no decirle la verdad? —cuestionó con una mueca, incómodo.

—Claro, ve y dile, 'la verdad estaba en tu cuarto a punto de follar con mi mejor amigo y ahora nos vamos a casa para seguir lo que interrumpiste, porque sí, estábamos debajo de la cama  cuando entraste, semidesnudos.' —imitó su tono ronco de voz, con algo de ironía mientras se abrigaba con su chaqueta.

—Bien, bien, nos vamos porque estás ebrio —bufó dándose por rendido ante el chico que siempre gustaba de ganar.

Luego de la despedida, el trayecto a casa fue corto, o así lo sintieron debido a que los fogosos besos les distraían lo suficiente para preocuparse del tiempo.

No sabían como llegaron a ese punto, cómo entraron a casa, en qué momento la ropa comenzó a sobrar, ni cómo llegaron a la pieza de Yoongi, específicamente, a su cama. Ocurría así siempre, ya no tenían noción de cuando empezó aquella extraña relación de amigos con derecho, sin embargo, a ninguno le molestaba. Eran completamente felices gozando del cuerpo adverso, de poder tocarse sin ningún pudor, sin preocupaciones, sólo ellos y la fascinante sensación de juntar sus cuerpos, de ser uno.

— Mmm... Yoongi, má-más rápido —gimió bajo el rubio, sobre sus labios, moviendo sus caderas al ritmo de las embestidas propinadas por el mayor.

El nombrado aceleró las estocadas, con mayor profundidad en cada una, sintiendo como las paredes de Jimin apretaban cada extremo de su polla. Tomó el miembro del menor entre sus dedos, masturbándole al ritmo de la penetración.

—¿Así?, ¿Te gusta duro? —susurró Yoongi, mordisqueando suavemente el lobulo de la oreja adversa—. No tienes idea de lo deseable que te ves en este minuto... Aunque te prefiero montándome.

—Me gusta más cu-cuando tú me mo-montas —respondió el castaño, perdido en las embestidas—. Es el paraíso ver como tu trasero traga mi polla.

—Es una lástima, hoy te toca abajo, cariño.

Sólo eran conscientes del placer que los embarcaba, los gemidos saliendo de sus labios, la entrega en todo su esplendor, recorriéndose en los lugares más recónditos, por parte de ambos, porque Jimin no dejaba de recordarle al mayor que ambos merecían el mismo placer, y para Yoongi la versatilidad no era un problema.

A pesar de todo, en sus interiores agradecían el no ser unos vírgenes inexpertos, porque el placer que se entregaban no sería el mismo si lo fueran. De alguna extraña forma, en esa muestra física, se demostraban el amor que les daba miedo profesar, ya que a pesar de hablar sucio en aquel momento, ellos sabían que aquel encuentro no era simplemente sexo.

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—¡Min Yoongi, estaba hablando del cumpleaños donde Hoseok se tiró a la piscina desnudo!

—Ups... Me pareció más interesante el que recordamos.

F i n.

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Holaaaaa, sí, después de mil años volví con el final.

Sinceramente, nunca olvidé el fic, sólo no encontraba la manera de terminarlo. A eso tengo que sumarle el trabajo, instituto y la práctica. Perdón si es un asco o no esperaban un final así. Nunca había escrito algo de este estilo, tampoco pensaba hacerlo, but, quise probar algo nuevo (?).

Gracias por el apoyo que recibió la historia, no pensé que les gustaría ;;. Gracias por los 300 seguidores, por los comentarios y todooo. Me hicieron muy feliz <3, porque en serio le tomé cariño a este fanfic.

Ahora sólo falta el epílogo, este sí lo subiré en lo que queda de semana.