Why You Love Me? ||Harry Styles||

Capítulo 30: Nuevo comienzo

Sus ojos se abrieron como platos... No se esperaba esa pregunta, eso lo pude notar en su expresión.

Su cabeza se agacho y sus cabellos lo cubrieron como una cortina.

Él arrepentimiento y la culpa se arremolinaron en mi pecho dándome una sensación no deseada y desagradable. Por inercia, mi mano izquierda fue directo a su cabello... Dejándolo libremente ante mi campo de visión.

Su cabeza se levantó y me observó con melancolía, tragó duro y se preparó para decir-; ¿No sabes quién soy?

- Pues claro que se quién eres, tonto.

Su cabeza se levanto completamente y él semblante melancólico desapareció dejándole el camino libre a la alegría que supe desde un principio que era exactamente lo que necesitaba.

Me alarmo cuando veo que Harry no me observa... Si no me abraza con fuerza sin querer soltarme, como si el mundo se fuera a acabar en este instante.

Te extrañé aunque no lo creas en lo más mínimo - comenta en mi hombro y mi corazón da un vuelco furioso entre mis costillas cuando lo escucho y multiplica su ritmo cuando su cabeza se hunde en mi cuello.

Por Dios, como si hubiera estado más de dos semanas profundamente dormida - bromeo.

Sus músculos algo decaídos se tensan cuando menciono lo ya dicho y se separa de mi.

Y entonces ¿porque preguntastes eso? - pregunta algo nervioso y dándole de largo a mi comentario.

- Pregunté eso porque... Te acabo de ver salir de esa cama - comenté señalando con él dedo acusador a la cama que se encontraba detrás de la anatomía de Harry - y tan de pronto entras con ese semblante inestable y tremendamente cambiado... Y no para bien. - la confusión me comenzó a  comer por dentro, ¿Como es posible esto?

No puedo hacer esto - murmura por lo bajo y la confusión aumenta él doble comiendome hasta los huesos - Jamie... Entrastes en un estado de coma hace dos meses y hoy... Acabas de despertar.

Mi mente se nubla y mi corazón deja de latir por un segundo entero.

¿En coma? No, no, eso no puede ser posible.

¿Qué? - susurré ya que mi voz  desapareció de mi interior - si es una broma es de las malas ¿escuchastes Harry?

- No, no estoy bromeando, jamás bromearía con este tipo de cosas Jamie - dice algo irritado por mi comentario. Me observa con ojos neutros antes de cerrarlos y suspirar con pesadez -  cuando te integrantes en este hospital, que fue por mi culpa, caístes inconsciente en la palanca del freno de una de las ruedas de la camilla, te incrustrastes la palanca en tu lado derecho de tu estómago. - mi vista viajó automáticamente a mi estómago y lo comienzo a tocar con dedos temblorosos - Ya no lo tienes - interrumpe él chico rizado a mi lado - con él tiempo curó de la infección que lo tomó y cicatrizó... Ahora solo tienes una marca en ese lugar. Estuvistes así por unos días hasta que despertastes, pero no de la manera que tanto anelabamos. Un ataque arrasó con tu cuerpo y mente, fue un ataque extraño, él Doctor Lautoud no ha podido descifrar que clase de ataque fue ese... Y de ahí no volvistes a despertar hasta él día de...

- ¡Es que no puede ser! - interrumpo comenzando a alarmante - ¡te acabo de ver salir de esa maldita cama, Harry! ¡Como va a ser que eso haya sido hace dos meses atrás!

- Calmate - murmura tranquilo y mi estado alarmante crece aun más.

- ¿¡Como puedes estar tan tranquilo!? -grito alterada y lo observo.

- Calmate - murmura por segunda vez pero con más volumen pero su voz no llega ha ser lo suficientemente fuerte para poder calmarme lo suficiente.

- ¡No puedo calmarme! ¡No puedo! - grito y la maquina eléctrica comienza a chillar con mas velocidad ya que mi pulso se esta acelerando.