Tu sonrisa como el Sol ✧ j e a r m i n

∆ CAPÍTULO 10 ∆

Jean
•

La hora del receso había llegado. Por fin un descanso de estas aburridas clases.

Hoy almorzaría con Marco y los chicos, hace un tiempo que no pasaba mis horas libres con ellos.

Llego a la cafetería y los visualizo sentados en una mesa del fondo.

Se encontraban: Marco, Mikasa, Ymir, Historia, Sasha y Connie.

Me dirijo hasta la mesa y me siento al lado de Marco y comienzo a comer el desayuno que había traído. Comenzamos a charlar de cualquier tema que se nos viniera a la mente y reíamos de las peleas entre Connie y Sasha.

— ¿Armin y tú estaban en una cita el otro día? — Dice Ymir riendo y todos me miran atentos.

Mikasa quien estaba un poco desinteresada en la conversación dirigió su mirada hacia mi, como si Armin no le hubiera dicho nada a ella ni a Eren.

— Sólo estábamos estudiando... — Digo rascándome la cabeza nervioso por las miradas de todos.

Marco algo serio cambia de tema y seguimos hablando normalmente. Pero noto que Mikasa aún sigue mirándome con esa seria expresión. Más que eso, me parece extraño que este aquí y no con el suicida de Eren, y tampoco está con Armin.

Entonces ella se levanta de la mesa y con la mirada me da a entender que la siga. Así que espero que se aleje un poco e invento la excusa de que tenía que ir al baño.

La visualizo caminando en los pasillos y me apresuro hasta llegar a su lado.

— Que raro que no estés con Eren — Digo para romper el silencio.

— Estoy un poco preocupada por él, últimamente ha estado mucho con ese profesor Levi.

Y no mentía, ya los había visto varias veces juntos y en lugares escondidos. ¿Acaso podría ser que se estén liando?

— Los he visto.

— Vamos a buscarlos Jean. ¿Dónde los has visto?

Perfecto, ahora esto se había convertido en una búsqueda del bastardo suicida con la chica que antes me gustaba. De verdad que estaba perfecto.

— Los he visto por la parte de atrás de la escuela.

Dije y nos dirigimos hacia allá. Armin no estaba con ella, así que seguro estaría por allí leyendo algún libro.

— Armin debe estar leyendo algún libro por la parte de atrás... — Pienso en voz alta y ella me mira de reojo.

Me he dado cuenta de que cuando hablan sobre Armin y yo, o hablo sobre Armin se encuentra un poco interesada. Es extraño, pero es mejor no preguntar.

Como pensaba Armin estaba leyendo debajo del árbol, pero decidimos no interrumpirlo.

La llevé hasta donde Armin y yo anteriormente habíamos visto al enano y a Eren y definitivamente estaban allí. Besándose.

Se percataron de nuestra presencia y se separaron inmediatamente. Pero no pude evitar borrar la sonrisa de mi cara, no se ni como hice para no estallar en risas en este momento. Se venía una buena escena.

—M-Mikasa... Puedo... Explicarlo... — Tartamudea Eren.

— No hay nada que explicar Eren... Era muy obvio que ustedes dos se traían algo. — Mikasa habla sin cambiar su serena expresión — Pero me molesta el hecho de que no confiaras en mi y no me dijeras nada acerca de esto.

Eren sólo rasco su cabeza y suspiró aliviado de que Mikasa no le matara.

— Y tú... — Vuelve a hablar Mikasa dirigiéndose hacia Levi — Si te atreves a hacerle algo a mi hermano — Se acerca peligrosamente hacia él y lo toma del cuello — No te liberarás tan fácil de mi.

Un aura sombría la rodeaba y la escena de que una chica sometiera a ese enano amargado no pudo causarme más gracia y estallé en carcajadas.

— Tsk. ¿Qué es tan gracioso caballo?

Está bien. Ya no era tan gracioso. Logró enfurecerme el enano.

— Jean cálmate — Dice Eren deteniendo mi mano que pronto iría a la cara de ese enano.

Bajo el brazo y Mikasa suelta al profesor.

Me volteo y veo a Armin que sigue concentrado en su libro y tiene sus rubios cabellos en la cara. La simple imagen me hace sonreír.

— Oye Jean — Me llama Mikasa — Y tú tampoco hagas algo de lo que te arrepentirás.

Y se fue con Eren hacia la parte de adentro de la escuela.

Pero no entendía lo que me dijo ¿Arrepentirme de qué? En fin, supongo que debería hacer caso omiso a lo que dijo.

Vuelvo a dirigir mi mirada hacia Armin, quien lee tan pacíficamente que dan ganas de tomarle una foto. Y un bombillo se enciende sobre mi cabeza.

Saco mi teléfono celular y calculo el ángulo perfecto, entonces le tomo la foto a Armin. Una foto que quedó bastante bien la verdad.

Camino hacia él y me siento a su lado. Se percata de mi presencia pero sigue leyendo. Yo sólo disfrutaba de su silenciosa compañía.

— El único medio de conservar el hombre su libertad es estar siempre dispuesto a morir por ella.

Armin de repente habló, quizás citando una frase de su libro.

— Es una frase de Edgar Allan Poe — Dice mirándome brevemente para después volver a su lectura.

Suspiro. Había planeado estar con los chicos hoy pero al final terminé estando con Armin. Pero no me disgusta, puedo decir que su compañía puede llegar a ser incluso mejor que la de ellos.

Tomé uno de sus mechones rubios y comencé a juguetear con él pero tratando de no causarle mucha molestia a Armin.

Deja su lectura y me mira. Un silencio nos rodea. Poco a poco nuestros rostros se van acercando y siento su respiración tan cerca que un escalofrío invade mi cuerpo.

— Jean

La voz me trajo a la realidad. Me doy cuenta de mi cercanía con Armin y rápidamente me separo avergonzado.

Levanto mi vista para encontrarme con Marco. Siempre se aparece en este tipo de momentos... Interesante.

— Dime Marco.

— Fuiste al baño y no volviste — Dice algo molesto.

— Tenía un asunto que resolver por aquí y me quedé con Armin, de todas maneras el recreo acabará — Apenas termino de hablar suena el timbre que avisa que el recreo ha acabado.

Entonces me levanto y le tiendo la mano a Armin para que haga lo mismo, quien la acepta y se levanta.

Le rodeo el hombro con mi brazo y caminamos así hasta el aula de clase.

De verdad, Armin era la mejor que compañía que podía tener.

∆•.°∆

N/A: ¡400 leídas! Muchas gracias de verdad~

Voten y comenten ^-^

Con Amor, Pau.