NO ES UNA RUBIA MÁS

39. UNA BODA INOLVIDABLE.

- ¿Podrías dejar de moverte? ¡Soy yo quien se casará no tú! Ya hasta abriste un hueco en el suelo. - Grita Lisa de pie en medio de la habitación.

- No grites que te despeinas y mamá me mata. - Digo sonriente. Sigo caminando de un lado al otro.

- Pues deja tú complejo de conejito de energizer. -

- No entiendes. - Mis hombros se escurren y alargo la cara.

- Todo saldrá bien. No estés nerviosa. - Lisa se acerca a mi y frota mi espalda con su mano.

- ¿No debería decirte yo eso a ti? - Lisa asiente y hace una mueca. Ando de los nervios. Hoy no he visto a Nate. Mi madre me mando a buscar para que me arreglaran junto con Lisa y ella. Y ya mi dulce abuela se encargó de decir sobre mi noviazgo con Nate... y si, mi madre por poco y se desmaya. Gracias a los dioses con todo lo de la boda, no ha habido chance de que tengamos una de esas "reuniones" famosamente conocidas como: "todos contra Maddie ". Pero yo se que pronto la habrá. Así como también se que hoy entre los invitados estarán muchos familiares y se me hará casi imposible cuidar lo que ellos dicen.

Tengo el presentimiento de que hoy toda la verdad saldrá a la luz.

- ¡Es hora! - Anuncia mi padre entrando y deslumbrando en su increíble traje a la medida. Lisa me mira ansiosa.

- Tranquila que si Will no estuviera ya esperándote en el altar lo sabríamos. - Comentó como si nada.

- ¡Maddie! - Mi padre y Lisa exclama.

- ¡Ay por todos los bebés del mundo! No digas que no pensaste en esa posibilidad. - Le paso su ramo.

- No ahora. - Mi padre ríe divertido. Si, tal vez no es algo que se le deba decir a la novia antes de que camine al altar.

- Bueno, ahora ya lo haces. - Le sonrio alcanzando mi ramo de dama de honor. - Te ves hermosa Lisa. - Ella me mira con sus ojos cristalizados. Para ser su día especial y toda esa chorrada, aún no llora. No puedo decir lo mismo de mi padre y Ethan que se la han pasado por los rincones llorando mares. ¿Qué con los hombres de esta familia?

- Las dos lucen hermosas. Tengo las hijas más guapas del mundo.- Nuestro padre se acerca a ambas y besa la mejilla de Lisa.
- ¿Vamos? - Le ofrece su brazo. Mi hermana asiente. Le ayudo a bajar el velo y le muestro mis pulgares en aprobación.

Camino por delante de ellos deteniéndome justo ante las puertas de cristal que dan al jardín. La boda se celebra en un hermoso viñedo. Los jardines son preciosos y la decoración elegante y delicada luce increíble. Parece todo sacado de un cuento de hadas.

- ¡Santas carambolas batman! - Exclamó horrorizada viendo quien se ha parado junto a mi.

- Hola. - Saluda sonriente. Quiero romper todos y cada uno de sus perfectisimos dientes con un martillo.

Nota mental para mi (decidí que mejor no las sigo contando): Llevar conmigo siempre un martillo. Thor lo hace así que debe ser muy útil.

- ¿Qué haces tú aquí? - Theo me mira indiferente y me ofrece su brazo.

- Soy tú acompañante. - Dice viéndome de reojo. Ruedo los ojos pero sin más remedio y sin rechistar, deslizó mi brazo en el suyo.

- No me hables. - Mascullo. ¿Que hace este idiota aquí? No creo que lo hayan invitado. No hay posibilidad. Todos saben quién es. Y ni Ethan sería tan idiota como para invitarlo.