Legados de Lorien: Archivos perdidos: Legados de los sobrevivientes.

Capítulo 6: Búsqueda

Cuando era niño( y no es que haya mucha diferencia entre los 6 a los 13 que tengo actualmente), salí con Crysta al parque. Los sube y baja siempre me han llamado la atención, pero los columpios eran mi debilidad. Me encantaba columpiarme lo más alto que pudiera para luego saltar. Uno de mis sueños es poder tener el legado para volar, no sé si seré lo suficientemente afortunado para tenerlo.

Un día en el parque salté del columpio pero caí y rodé golpeando luego contra un árbol cercano, no tenía porqué golpearme, lo había hecho mil veces... Esta vez la emoción me ganó, usé mucha fuerza al saltar y no pude detenerme; Rodé y el golpe fué tan fuerte que me dejó aturdido y confundido. Juré no volver a hacer algo estúpido.

Confundido y aturdido... es como me siento justo ahora. Habíamos volado en un avión, llegamos a Londres por culpa de mis estúpidos sueños, esperaba encontrar una buena señal de la Garde... Y vaya que la hemos encontramos.

Un mensaje que seguramente alguien desesperado escribiría. Mis hermanos están atónitos, se siente justo como cuando encontramos a número Uno.

Nadie se movía y miramos la muerte de una compañera, me prometí a mí mismo que no volvería a ocurrir; no dejaré que eso pase.

Tomo la computadora y me dispongo a escribir, quiero decirle "estamos contigo, pronto iremos a ayudarte". Quiero darle ánimo y seguridad, pero Tyson me quita de golpe la portátil.

- ¿Estas loco? No puedes responder, ¡ ellos sabrán dónde estamos!.

- pero si no lo hacemos, ellos también lo encontrarán, debemos decirle que no se desespere.

- Olvídalo, saldremos y los buscaremos... - responde Tyson cuando un sonido de la portátil nos vuelve a dejar en Shock. Observamos la pantalla nuevamente y hay un comentario en el blog, alguien ha respondido

" Estamos aquí "

Alguien acudió al grito de auxilio. Hay esperanzas.

- Rápido - dice Crysta - puedo sentirlo, los dos lorienses están separados, pero el más cercano no está lejos.

Nadie discute. Dejamos todo y salimos del hotel, Crysta es la que nos guía.

Corremos por las calles de Londres. Puedo ver lugares hermosos: enormes restaurantes, algunos parques e iglesias, pero no tengo tiempo para admirarlos.

Han pasado más o menos cuatro minutos desde que salimos y hemos recorrido alrededor de 2 km. Supongo que la mejora en la velocidad es una gran ayuda. Tyson va atrás, él no es un garde como nosotros, pero no podemos dejarlo atrás. La gente tampoco se preocupa por ver a dos adolescentes y a un joven correr como locos. La mayoría no nos presta atención.

Hemos avanzado dos calles más cuando Crysta se detiene. La rebaso, pero volteo y veo horror en su rostro. Retrocedo y me pongo frente a ella, lágrimas surgen de su cara y es cuando me doy cuenta, ella no tiene que decirme lo que sucede, aún así me lo confirma. Tyson llega a nuestro lado y Crysta le da la noticia

- Llegamos tarde - dice llorando - Se ha ido.. Lo mataron.

No había notado el viento helado de este lugar. Quiero encontrar a un Mog y golpearlo hasta que muera, no puede ser que nuestra historia se vuelva a repetir, se supone que nosotros seríamos de ayuda para los Garde, que los apoyaríamos, pero sólo los estamos viendo morir.

- Aún hay esperanza - Tyson nos dice - Busca al otro Loriense, esperemos que sea el Garde.

Son palabras duras, hubiéramos querido encontrar a ambos, Garde y Cêpan, pero debemos movernos, no hay tiempo para llorar.

Seguimos avanzando y Crysta nos guía, hay personas corriendo en dirección opuesta hacia nosotros, al parecer queriendo escapar. Un autobús está en llamas, hay caos y conmoción cada vez más fuerte. Es entonces cuando los vemos a distancia.

Igual que en Malasia, hombres con gabardinas y chaquetas negras, unos son enormes y otros más pequeños. Deben haber al menos unos 30. Nos ocultamos tras unos autos.

- Debieron capturarlo, no escucho disparos. - Nos dice Tyson - ¿Aún está con vida?

- Si - afirma Crysta - no me explico porqué no lo han asesinado.

- No debe ser el número 2. Tal vez no pueden hacerle nada por el hechizo. - digo, admito que es un rayo de esperanza que me alberga.

- Tenemos que averiguarlo. Esperen un momento. - Tyson sale del auto y se acerca al Mog que está más cerca. Esos desgracidos están muy confiados, pues el soldado está sólo y totalmente expuesto. Cree que no hay peligro alrededor.

Tyson va detrás de él, lo toma por el cuello y no le da tiempo ni de pronunciar una palabra. Su cuerpo cae al suelo, ni siquiera los Mogs pueden defenderse ante la brutalidad de Tyson, le rompió el cuello muy fácilmente y sin ser detectado. Antes de que empezara a caer, el Mog empieza a desintegrarse.

- Eso es asqueroso - me dice Crysta. Coincido Totalmente.

Tyson toma el arma del Mog, a pesar de que él tiene una pequeña. A nosotros no nos deja usar armas fuera de nuestro apartamento. Esta es una situación especial. Nos dió una a cada uno. Aún no tenemos legados agresivos como crear bolas de fuego, hielo, o telequinesis (que se supone todos los garde la tienen cuando aparece su primer legado). Pero Crysta aún no la ha desarrollado. Yo aún menos.

Tyson se abre camino disparando con su arma silenciosa a otro Mog. Nos hace la señal para que avancemos.

Al parecer, todo se centra en ese autobús. El humo de éste se eleva y los Mogs rodean el perímetro. Hay guardias por todos los costados. Es un equipo bien equilibrado. Unos custodian y otros atacan.

<<bola de cobardes, necesitan muchos para ir contra uno.>> pienso. Me molesta, es más me pone furioso. Ya nos atacaron y ahora nos están cazando. Hoy es su turno de ser la presa. Eso me hace sonreír y me da una ola de energía. Siento una adrenalina por todo mi cuerpo. Estoy ansioso así que pregunto.

- ¿cómo nos acercaremos?

Tyson me observa y sonríe junto conmigo. Es una de esos momentos de complicidad que compartimos. Carga el rifle que le quitó al Mog y me lo entrega.

- Del modo difícil pero más efectivo - me responde con una sonrisa malévola – Los mataremos a todos...