Tres

92 13 0
                                    

Agarré mi mochila y fui corriendo a la escuela rogando que no fuera tarde, aparentemente no, hasta había llegado mas temprano.
Llegué al salón y tomé mi asiento al mismo tiempo que abría el cierre de mi mochila para sacar mi libro favorito sobre Edgar Allan Poe y H. P. Lovecraft hasta que llegaron...
Venían platicando alegremente hasta que me vieron y cambiaron su expresión a una mueca que a cualquiera le daría miedo.
Empezó la clase y ellos no dejaban de platicar, lo que hacía que yo no pudiera poner atención, hasta que me harté y grité-¡Cállense!-haciendo que todos me miraran y la maestra detuviera su clase, pero en vez de que los regañara a ellos o si quiera los callara, me mandó a la dirección.
El director también me regañó y me dijo que dejara de culpar a personas que no existen. -Claro que existen- me dije para tranquilizarme.
Volví al salón agarré mi mochila y me fui de ahí corriendo hasta llegar a mi casa con lágrimas en los ojos tratando de entender lo que pasaba.

¿Crees en los fantasmas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora