Te amaré por siempre (Inuyasha)

Capítulo 20

*2 meses después

Las cosas habían ido muy bien estos 2 últimos meses, Inuyasha y Aome seguían viajando entre las 2 épocas con Yumiko, que ya estaba mucho más grande, le encantaba jugar con Shippo y Kirara, todos seguían esperando la aparición de Naraku pero ya después pensaron que ya nunca iba a aparecer por lo que siguieron su vida, Sango tenía 4 meses de embarazo, por lo que apenas se le comenzaba a asomar su pequeño bulto por su cadera, un día, Aome se encontraba en su cabaña junto a Sango, Miroku, Shippo, la anciana Kaede e Inuyasha, cuando escuchan un fuerte ruido, todos salen dejando a Yumiko sentada en el piso junto a Kirara, ven que se comienza a formar una nube negra oscureciendo el lugar.

-Esto es...-Comenzó a decir Aome.

-Naraku.-Dijo Inuyasha susurrando.

-Tenemos que irnos, Sango, quédate con Yumiko y Shippo.-Dijo Aome entrando rápidamente buscando su arco y sus flechas, dentro de su cabaña, Sango se acerca a Aome frunciendo el ceño.

-¡¿Qué?! Yo voy a ir con ustedes.-Dijo Sango sin dejar de fruncir el ceño.

-Naraku podría dañar a tu bebé, te tienes que quedar, lo siento Sango, ¡vamos Miroku, Inuyasha!-Gritó Aome, ella comienza a correr, e Inuyasha y Miroku corren detrás de ella, a los pocos minutos llegan hacia donde se encontraba Naraku, lo ven parado teniendo a sus lados unos demonios.

-Inuyasha, Aome, mucho tiempo sin verlos.-Dijo Naraku sonriendo, Inuyasha saca su espada y se pone en frente de Aome.

-¡No le harás daño!-Gritó molesto.

-Siempre tan dispuesto a dar tu vida por tu mujer, que dulce, Inuyasha.-

Inuyasha frunce el ceño y se acerca a atacar a Naraku, Miroku y Aome comenzaron a atacarlo junto a Inuyasha, Naraku esquiva sus ataques, Inuyasha lo ataca y Miroku también, Aome le lanza una flecha purificadora a Naraku y luego de una ardua pelea, Inuyasha ataca a Naraku destruyéndolo, Inuyasha agarra la perla de Shikon y se lo entrega a Aome.

-Pide un deseo, Aome.-Dijo Inuyasha, pero en eso, un demonio de Naraku revive, aparece por atrás de Inuyasha (que se encontraba en frente de Aome) y le clava su brazo filoso en el pecho de Inuyasha.

-¡Inuyasha!-Gritó Aome soltando la perla y corriendo hacia Inuyasha, Miroku estaba sin palabras, pero aun así derrotó al demonio antes de que pudiera lastimar a Aome, él se alejó unos pasos y se quedó callado viendo como Aome agarraba a Inuyasha y lo acostaba sobre sus piernas.

-No por favor, no mueras.-Dijo Aome comenzando a llorar, ella había colocado sus manos sobre el agujero que tenía Inuyasha sobre su pecho en un vago intento de frenarle la sangre a Inuyasha, él le agarra una mano y la mira cerrando un poco sus ojos.

-Para, sabes que eso no funcionará.-

-Inuyasha...-Dijo Aome notándose como unas pequeñas lágrimas salían de sus ojos.

-¡No! ¡Tengo que hacer algo! ¡No voy a dejar que mueras!-Gritó Aome moviendo su cabeza y apretando hacia abajo con fuerza.

-Siempre siendo tan tonta.-Dijo Inuyasha riendo cansadamente, Aome siguió apretando sus manos contra su pecho pero luego de unos segundos, al notar como Inuyasha lucía cada vez más cansado, ella se detuvo.

-Inuyasha...-Dijo su nombre susurrando.

-Quiero que cuides a Yumiko, ella te protegerá cuando crezca.-Dijo Inuyasha.

-Sé que lo harás muy bien, te amo Aome, y te amaré por siempre.-Dijo Inuyasha cerrando sus ojos, Aome vuelve a llorar y abraza a Inuyasha.

-¡No! Yo... Yo también te amaré por siempre.-Dijo Aome cerrando sus ojos, Aome podía sentir como las respiraciones de Inuyasha habían parado, como se encontraba completamente quieto, Aome no dejaba de abrazar el cuerpo de su fallecido esposo, parecía que toda su vida había pasado por su mente en un mar de recuerdos que no paraban de llegar.