(δ + m) ψ = 0 /380

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(δ + m) ψ = 0

¿Cuando te vayas podrías cerrar la puerta?
De verdad espero que lo hagas.

Cuando no estés tendré el tiempo para recordar. Recordaré todas esas cosas y momentos que el reloj dejó en la historia.
Y cuando lea lo que dejaste al reverso de mi libreta prometo no llorar, nunca te dije cuanto odiaba el hecho de que escribieras en mi libreta.
Y al escuchar la canción que te hacía sonreír prometo no adelantar el reproductor.
Y para cuando los árboles ya hayan dejado caer sus hojas sin más alternativa yo he de haber perdido tus memorias, pero observaré aún en los rostros ajenos tu sonrisa dispareja y la coloración de tus mejillas, también tus cejas pobladas.

Y esa voz que siempre deteste oír se perderá en el vacío, no podré recordar su timbre nunca más, luego pasará a la historia como una mentira.

¿Aún sigues creyendo que nunca te quise?

Cuando al pie de tu ventana mirando a través de ella la transitada avenida llegue a tu memoria mi olvidada existencia he de haber ganado esta guerra. Tu cigarrillo se ha de consumir, y la bata negra que cubra a tu cansado cuerpo ha de haber perdido el color, y mi fantasma va a estar ahí, al reverso de la luna, y por un momento los autos dejaran de correr y el cigarrillo no podrá regalarte más placer. Para cuando los autos vuelvan a correr nuestra historia tendrá sentido.

Y tus hijos invisibles lloraran tu muerte.
El último rastro de oxígeno en tu organismo desaparecerá cruelmente, y yo estaré esperándote con paciencia. Entonces podremos existir, con la piel arrugada y la vista cansada, con la experiencia encima de nuestras espaldas y sonrisas ensayadas. Ya no pensaremos en morir nunca más.
Sólo entonces intentaré besarte, y si tú quieres podrás corresponderme.
Mis graves, tus agudos, una canción.
Al final mi manera de quererte no es tan imposible ¿Todavía quieres esperar?, Yo si.

Estoy equivocado tal vez, y cantarle a tu fantasma no esté bien, pero al final me regalaras una caricia.
Podré volver a existir.

Tu aliento atravesando mis fosas nasales.
Tu existencia es más real.
Mi cordura cada vez más lejana. Y creo que te puedes quedar si prometes jamás irte después de tu último respiro.

Nada Personal, Sólo Palabras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora