Anecdotas De Lily Luna Potter

Planes y mas Planes

Ahora me encontraba en el auto de Scorp, llendo hacia una casa demasiado grande y rústica.

-Scorp, te dije que...- dije yo empezando a protestar.

-Lily, se que dijiste, pero enserio quiero que veas esta casa, por favor - dijo rogando

-Esta bien, vamos.- dije yo besándolo en la mejilla.

Entramos y realmente me sorprendió lo que vi. Por fuera todo era de piedra, pero por dentro era muy hermosa.

-¿Te gusta?- preguntó

-Me encanta- dije sonriendo

-Lo mejor de esta casa es que tiene pasadizos secretos, es antigua pero firme y a la vez moderna. Se cuanto te encantaba Hogwarts y se que estarás feliz de vivir con un pedacito del Colegio.- dijo pero yo ya estaba entrando en la sala.- esta es la sala, cariño.

Era preciosa, tenía colores claros y largas ventanas de cristal que daban al jardín lleno de flores.

El siguió guiándome - Este es la recámara principal- dijo cuando subimos a la segunda planta-
Cada habitación tiene su propio baño, pero también hay uno en cada planta de la casa.

Todo era precioso. Tenía dos habitaciones principales. Y había demasiadas más

-Scorp... sigo pensando que es mucho...- dije mirándolo

-Con una familia como la nuestra es mejor tener una casa grande. Además, todavía te falta ver lo mejor, esto será lo que te haga decidirte por comprarla.- dijo tomando mi mano y guiándome al jardín

Me quedé totalmente sorprendida por lo que veía. Era un bosque, un bosque en el jardín, tenía pasillos, flores, una gran tarima con una larga mesa, un área de juegos, piscina. Y su propio campo de Quiddicht. Sin duda la casa era gigantesca, incluso más grande que la Madriguera, la Mansión Malfoy y la Potter juntas, pero era perfecta, simplemente lo era. Yo amo esta casa y la quiero.

-¿Y bien, cariño?- preguntó

-La quiero- dije segura admirando la belleza de la casa.

-Ya es tuya, Cariño- dijo mirándome a los ojos y sonriendo de lado- Ya la he comprado

-¿Que?- pregunté alarmada-¿ Y si no me gustaba?

-Te conozco a la perfección, Potty- dijo usando un apodo burlón de mi apellido

-Oh, calla, mini-hurón - dije besándolo- Y pensar que está será nuestra casa en tan sólo una semana

-Si, no puedo esperar para vivir aquí, pero tenemos que empezar a remodelar algunas cosas y traer muebles. En eso tocaron el timbre, fuimos a abrir y empezó a llegar toda la familia. Llevaron comida y nos sentamos en el comedor.

-¿Y a donde irán de Luna de miel?- preguntó Alice pícara

-A Alaska, nos convertiremos en pingüinos el uno al otro- dijo serio y todos lo miraron expectantes, yo empecé a reír como foca retrasada. - Era broma, yo odio Alaska.

-Según nuestros ahorros, iremos una semana a Italia, una semana a Francia, otra a Brasil y la última estaremos en casa.- dije riendo

-Vaya, tienen buenos ahorros- dijo Hugo

Scorp sonrió- Hemos ahorrado desde que tenemos 5 años- dijo- Claro que a esa edad no tenía ese fin

-Entonces, ¿Para que era?- dijo Rose y nosotros nos miramos riendo

-Queríamos ir Disneylandia- dije yo susurrando.

Todos rieron - ¡Vamos, sus padres los pudieron haber llevado!- dijo Hugo

-Callate, Hugo. El prometió llevarme algún día.- dije refiriéndome a Scorp- pero no iríamos de Luna de miel a Disneylandia.

-¿Asi que, aquí vivirán?- dijo mi madrina Luna- ¿La quieres, Lunita?

-Amo esta casa, madrina- dije yo- Es grande, pero es hermosa.

Después de un rato volvimos a la Madriguera, aunque no sabía porque seguíamos viviendo todos juntos si ya no había alerta de magos oscuros, pero imagino que es por precaución.... creo.