Un futuro juntos~Drarry

Capítulo 24.-Siguen las charlas

Mientras Ron, Hermione, Harry y Neville caminaban por el jardín hablando de los posibles padres y metiéndose con el cuarto, siendo los únicos temas de conversación que lograban sacarse los unos a los otros, un espléndido Theodore Nott, acompañado de Draco, Pansy y Blaise, aparecieron delante de ellos.

-Buenas tardes, chicos, ¿podría robaros a Neville? Aún tenemos una conversación pendiente después de que se escapara en el Gran Comedor-dijo, mirándolo intensamente y haciendo que el mencionado se sonrojara.

-Por supuesto que te lo puedes llevar, Theo-dijo Ron mientras Harry le daba un empujón a Nev, haciendo que se tropezara y que Theo impidiera su caída mientras los otros 4 los miraban divertidos-. Serás el padre de nuestros futuros ahijados, ¿cómo no te íbamos a dejar? Sólo... No te olvides de los hechizos, no queremos mini Theo's y mini Nev's correteando por ahí antes de tiempo.

Ambos se pusieron rojos hasta las orejas mientras los otros se reían a su costa. De un momento a otro, Neville se enderezó, cogió a Theo del brazo y se largaron sabe Merlín a dónde.

-Bueno, ahora que los dos tortolitos se han marchado... ¿Qué les parece congelar una parte del lado negro, poner un hechizo de privacidad y patinar un poco?-Preguntó Hermione con una sonrisa de niña-Ahora que estamos aquí no estaría mal poder divertirnos durante un poco.

El resto se dirigieron miradas los unos a los otros, se encogieron de hombros y asintieron, haciendo que la sonrisa de la castaña se ampliase y corriera hacia el lago negro, dejando a los otros asombrados por su comportamiento y a Pansy con una sonrisa boba.

***

-¿Daphne? ¿Estás aquí?-Preguntó Ginny entrando en la sala común de Slytherin y haciendo que todos la miraran raro.

-Ginny, mi ahijada está en la habitación de Regulus esperándote. Es la primera a la izquierda.

-Gracias, tío Lucius-dijo ella dándole un rápido beso en la mejilla.

-De nada, querida-respondió algo sorprendido mientras se tocaba la mejilla, aún no estaba acostumbrado a esas muestras de afecto.

Ginny subió las escaleras corriendo y, cuando llegó a la puerta que Lucius le había indicado, tocó. Una rápida mano salió, la agarró del brazo y la metió en la habitación, apresándola contra la puerta una vez esta se cerró.

-¿Cómo pudiste creer que mis hijos no eran los tuyos? Sólo tenías que verlos para saber que erais familia... Theo y Tory tienen los ojos de tus hermanos, Harry tiene los tuyos y Percy y Daphne son pelirrojos, aparte de que ella es una copia exacta de ti, no sé cómo pudiste dudar de que eran tus hijos.

-Nunca lo dudé o, por lo menos, nunca dudé tanto como los otros, Daphne. Nunca dudé que me amases y nunca negué la gran posibilidad de que tus hijos fueran los míos... No soy como Harry y Ron quienes aparentan bien pero todo el mundo sabe que se están cayendo por los pasillos al pensar que no son padres de los Malfoy y los Zabinni... No soy mi hermano Fred, a quien le da por acostarse con Viktor y no se da cuenta de que el segundo está loquito por él, ni soy mi hermano George que no le habla a Flint desde que el primero de sus hijos se presentó, a pesar de que llevan casi 2 años acostándose. Y, mucho menos, soy Bellatrix y termino con mi novia y a la que supuestamente amo por las sospechas de que sus hijos no sean comunes. Soy capaz de pensar por mi cuenta y de sacar mis propias conclusiones.

-Esa es mi niña-dijo Daphne justo antes de besarla para así sellar su noviazgo.

***

-Meera... Meera... ¡Meera, coño, espérame!-Gritaba Casy mientras corría detrás de su amada en uno de los pasillos más solitarios de Hogwarts.