Apenas podía hablar, casi no se escuchaba mi voz, abrieron la puerta y escuche su voz, si la voz de Alexander.
-¿Se puede?-
Y ahí estaba el, con dos cafés en la mano.
-¿Que hace el aquí mama?- Le respondí con un tono muy bajo -Pasa Alexander, mira quien acaba de despertar- Dijo mi madre. me miro con ojos de sorpresa.
-Gracias a dios que estas bien Mariana, te debo una disculpa, de verdad no sabes lo avergonzado que me siento, fui un patán, lose-
-El a venido todos los días desde que estuviste en coma, te ha leído e incluso se a quedado a verla por las noches-
-No tenias porque hacerlo, no tienes que sentir lastima por mi-
-Los dejare solos en lo que platican- dijo mi mama
-No... Tarde en responder cuando mi mama ya estaba del otro lado de la puerta-
-No tienes que estar aquí-
-Si tengo, siento que me necesitas tanto como yo a ti- Se acerco a mi me tomo de la mano, con tanta delicadeza, paso sus dedos por mis heridas,y derramo una lagrima rápido volteo hacia la puerta.
-¿Te dan pena mis heridas?-
-No para nada, yo también tengo, pero las mías son en el alma- El seguía mirando a la puerta de la habitación -Quiero poder estar contigo cuando me necesites, cuando quieras lastimarte yo estaré ahí, cuando quieras vomitar, te diré no lo hagas, que así eres muy linda,a si me gustas tu a mi-
-¿Porque ese cambio?,¿Porque de pronto te preocupo?, -jamas mi habías dirigido la palabra, en nuestra graduación de primaria me dijiste que era fea,gorda y que no querías bailar conmigo¿lo olvidaste?, Durante la secundaria me decías bola de manteca¿A caso no lo recuerdas?-Le pregunte con lagrimas en los ojos.
-Se que fui tan grosero contigo, Pero era un niño malcriado, un tonto, no sabia lo que hacia, ahora quiero arreglar todo lo que hice,porque aun que no lo creas siempre te he tenido presente en mis pensamientos y los daños que te cause y quiero remediarlo por favor déjame estar contigo-
-¿Como puedo dejar entrar a alguien a mi vida, cuando destruyo mi infancia?¿Como? Jamas he olvidado las ofensas, me empece a obsesionar con mi peso, empece a vomitar, todos los días lloraba, y ahora lo que tengo es una enfermedad la cual quiero detener pero una parte de mi dice, no lo hagas eres una gorda, una manteca con patas, necesitas ser delgada, pero en realidad no del todo es tu culpa, yo decidí tomar este camino, mi mama jamas estuvo ahí cuando la necesitaba,¿Pero porque dijiste que no sabias mi nombre aquella vez en la enfermería?-Le pregunte.
-Me daba vergüenza contigo, pensé que ya habías olvidado todo lo que te había hecho. Y el día que te hice la grosería en la cafetería, perdóname estaba enojado, y frustrado no saber como acercarme a ti, soy un idiota ¿Me darías una oportunidad?¿Podemos empezar de nuevo?.¿Que dices?-
-Nose, me da miedo, ¿Y si después te retractas?¿Y olvidad esto?-
-Jamas lo olvidare, es una promesa- Se acerco a mi y tomo de nuevo mis manos. -De hoy en adelante estaré para cuando me necesites- Nos miramos y me dio un beso en la frente.
No podía creer lo que estaba pasando, Alexander el chico mas popular, el chico que daño mi infancia esta conmigo en mi habitación del hospital, pidiéndome disculpas, todo esto era tan extraño, acababa de despertar de un profundo sueño.....
-Pero tienes que descansar Mariana, es mejor que me valla para que duermas un poco-
-¿Dormir mas?, he dormido 2 meses ¿Te párese poco?- En realidad no quería que se fueras, el simple hecho de verlo a mi lado me hacia sentir tan bien.
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La Historia De Mariana
RomanceHola me llamo Mariana. Soy una chica antisocial. Hay un chico si Alexander el hace tiempo en 6to grado de primaria me criticaba por ser fea y gorda lo que el no sabia que esas palabras me convirtiera en una chica depresiva. Pero el amor...