Cambio De Papeles

CAPÍTULO 5

Miré a Marcus y él se mostraba un tanto preocupado, dirigí mi mirada hacia Martha y también se notaba asustada, dirigí mi mirada de nuevo hacia la sala donde se había escuchado el ruido y comencé a correr hacia allí.

Cuando estaba a punto de llegar a la sala, me recosté en la pared blanca y miré hacia la sala había un chico estaba de espaldas por lo que no pude identificarlo, el chico puso sus manos en su cabello y pasó sus dedos hasta llegar a su nuca, se agachó y tapó sus oídos, se quedó unos segundos ahí y gritó lo mas fuerte que pudo, para finalmente levantarse coger el jarrón y tirarlo fuertemente hacia el suelo, para luego tirar un par de papeles que se encontraban cerca.

Lentamente me acerqué hacia él por detrás y cuando iba a arrojar otro florero tomé su muñeca por detrás y la gire haciendo que soltara un gemido de dolor y tomé el jarrón y lo dejé en un sillón, puse su brazo en su espalda y lo puse contra la pared, tomé su cabello haciendo que su cabeza se
dirigiera hacia arriba.

-Isabella- dijo Marcus interrumpiendo mi escena de policía en las películas- El es mi hijo, Jason- mis ojos se abrieron y dirigí mi mirada hacia el chico y lo solté rápidamente.

-Lo siento, señor Marcus, pensé que...

-Así que está es a la que contrataste- dijo mirándome con desprecio.

-Si, y "esta" tiene nombre- dije enojada.

-Jason, ella es Isabella, Isabella, él es Jason- dijo Marcus, mientras Jason me sonreía como idiota, a lo que voltee los ojos, que bipolar era este chico- quiero que recojas eso, Jason- dijo mientras señalaba lo que minutos antes había arrojado al suelo.

-Sabes que no lo haré- dijo mientras caminaba para irse, alcancé a agarrar la gorra de su sudadera, por lo que cuando intentó seguir caminando, se ahorcó con la sudadera haciendo que volviera hacia donde estaba.

-Creo que tu padre te dijo que hicieras algo- dije mientras elevaba una ceja y lo miraba enojada.

-No eres nadie para que me diga que hacer- dijo desafiante.

-Pues, no me importa, ahora recoge eso, ahora.

-¡Martha!- grito desde la sala, a lo que Martha casi de inmediato llegó a la sala.

-¿Si, joven Jason?

-Recoge eso, rápido- Martha se iba a acercar a recoger las cosas pero puse mi mano y la frené, mientras que con la otra aún sostenía la gorra de la sudadera de Jason.

-No usaras a Martha para librarte esta vez, Martha, no quiero darte órdenes pero no lo recojas y vuelve a la cocina- Martha dirigió su mirada a Marcus, quién miraba la escena divertido y a la vez orgulloso, el asintió y Martha se marchó.

-¿Seguirás llorando como niñita o recogerás lo que tu mismo tiraste?- El se safó de mi agarre y corrió hacia otra parte- ¡Si tú no lo recoges nadie lo hará!

-¿Sabes? Creo que a Jason le servirá que estés aquí, Bella.

Le sonreí y fui a la cocina donde estaba Martha, le pedí una escoba, se ofreció a limpiarlo, pero no estaba en mis planes limpiar el desorden de Jason, agarré la escoba y recogí todo, fui donde Marcus y me dijo que Jason estaba en la cocina y que su habitación quedaba en la última puerta del 3 piso, caminé hasta allí y puse la mitad de la basura afuera de su puerta y comencé a esparcirla por su habitación, que estaba bastante ordenada, tendría que recogerlo y aprender a no ser un niñito mimado a las buenas o a las malas.

Baje rápidamente y fui hacia la cocina , Jason ya no se encontraba allí, me senté en una silla y agarré una manzana mientras "disimulaba" que había estado sentada allí hace un buen rato. Pocos segundos después Jason pasó por la cocina molesto y se dirigió hacia arriba, escuché sus pasos por las escaleras y como avanzaba rápidamente hacia su habitación.

-¡Papá!

Marcus se dirigió hacia arriba rápidamente, siguiéndolo Martha y un hombre vestido de negro, conté 5 segundos y me levanté para seguirlos, lentamente subí las escaleras y me encontré con un Jason enojado y un Marcus a punto de estallar a risas, cuando me puse enfrente de ellos, todos dirigieron su vista hacia a mí y Jason me apuntó con su dedo enojado.

-¡Tu! Fuiste tú ¿verdad? No puedes llegar a esta casa y poner basura en mi cuarto, me das lástima, pero más lástima me dan tus padres, que tuvieron que aguantarte- oh no, no se había atrevido, miré a Marcus y él me miró preocupado, mientras yo estaba furiosa, pagaría por decir eso y lo pagaría muy caro...

No me lo puedo creer 104 vistas, eso me llena de emoción *c menea* :v
Darling, fuera.