Capítulo 15 - Sólo intentémoslo.

1K 110 42
                                    

Cuando Seokjin pasó la puerta de la sala de emergencias suspiró un poco aliviado al ver a Jungkook recostado en la camilla observando cómo eran atendidos las otras personas que por algún motivo se encontraban allí también.

—Jungkook —fue lo único que acató en decir el castaño cuando estuvo a su lado. El menor se giró y lo miró con los ojos desorbitados, mientras sus labios temblaban demostrando lo asustado que estaba al verlo.

—Yo... debes escucharme —imploró con desespero.

—Tranquilo —Jin puso su mano en la mejilla del otro—. Hablaremos en casa, ¿te sientes bien? —Jungkook le miró con algo de desconfianza y tragó con fuerza.

—L-lo estoy —dirigió su mirada al pie implicado—. Me duele, pero la férula ayuda un poco.

Jin asintió y siguió la mirada del otro. El pie estaba bastante hinchado, además había sido inmovilizado con una férula de color negro que lucía muy apretada.

—¿Namjoon te dijo algo?

—Eh... —se rascó la cabeza sin saber si decirle o no lo que el rubio le había confiado.

—Le dije que le daría las indicaciones a Yoongi porque tú no sabes poner ni una curita —apareció de la nada con un café humeante en la mano—. Debes irte, Jungkook necesita comer y reposar.

El hermano mayor se hizo a un lado para que un par de enfermeros ayudaran a Jungkook a sentarse en una silla de ruedas.

—Si necesitas algo puedes decirle a Yoongi, él me llamará —Namjoon le revolvió los cabellos al menor y éste sonrió—. Nos vemos... nos vemos cuando logre salir de aquí —hizo una mueca.

—Gracias —expresó Jungkook siendo llevado por uno de los chicos.

—Es mi trabajo, aunque esto no debió suceder —dijo lo último entre dientes para que su hermano fuese el único que lo escuchara.

—Díselo a Jimin —Jin lo empujó con el cuerpo para seguir tras los enfermeros.

─●──●──●──●──●─

Yoongi recogía los platos en silencio, se sentía tan culpable que le era difícil mirar a Jungkook, quería disculparse por no haber calculado lo que sus palabras podrían ocasionar.

—¿E-estás... quieres algo más para comer? —preguntó a Jungkook que negó con la cabeza mientras bostezaba—. ¿Te traigo otra almohada para que puedas...? —Jin llegó, interrumpiéndolo, su cabello estaba húmedo y usaba un pijama que constaba de un pantalón gris y una camisilla blanca.

—Yoongi, ven un momento, por favor —el mencionado miró a Jungkook y luego salió de la habitación con el ceño fruncido.

—¿Qué sucede?

—Te dije que quería a Jungkook en mi cuarto —el pelirrojo se mordió el labio inferior al recordar la orden dada por el castaño.

—Lo olvidé —admitió—, baja a comer, mientras lo haces reacomodaré a Jungkook en tu habitación.

—Está bien —miró la hora en su teléfono móvil—. Sé que es tarde pero dile que no se duerma aún, necesito hablar con él —siguió su camino masajeándose las sienes, su cabeza quería explotar.

—Odio todo —jadeó Yoongi antes de entrar de nuevo a la habitación, quería estar en su cama, pero no sería capaz de hacerlo hasta que viese a Jungkook completamente dormido.

—¿Está todo bien? —preguntó el moreno en bien lo vio entrar.

—Lo está, olvidé que este ya no sería tu cuarto, no sé dónde demonios tengo la cabeza.

ThreesomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora