Mañana Fría

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La alarma sonó, despertandonos a mi y a mi prima, eran las 6 de la mañana de un martes frío, el cielo gris igual que el clima, perfecto para dormir. Mis ganas de ir al trabajo se esfumaron al momento de ver esa hermosa mañana y recordar mi trasnocho por quedarme hablando con mi prima. Al final, decidí levantarme, no tenía otra opción, trayendome conmigo a mi prima, para que me hiciera una clineja ya que no quería arreglarme el cabello.

Poco tiempo después, al ya estar lista, salí del apartamento dejándola con sus hermanitos ya que sus padres no estaban. Al regresar ese día, ella, un poco alterada, me contó lo sucedido esa mañana luego de que yo me fuera:

Ella al despedirme se acostó en la habitación de sus padres pero al sentir el frío decidió regresar a su cuarto, donde estaban sus hermanos pequeños durmiendo en la cama de abajo de la litera. Ella se subió a su cama y se acostó un poco a la orilla opuesta a la que da la pared. Tratando de volver a dormir, se colocó el brazo derecho sobre sus ojos, con la cabeza mirando hacia el armario, a su izquierda.

En ese momento, de repente, sintió una presión en el pecho, que la tenía un poco aturdida. Miró hacia el espejo de la peinadora para, ver en el reflejo y verificar que sus hermanos siguieran dormidos, cosa que sí fue así. Sintió una presencia extraña en su lado derecho, bajó su brazo derecho hasta el pecho donde la presión continuaba y se arriesgó a voltear el rostro.

Cosa que no logró, ya que su cuerpo estaba paralizado y no la dejaba girar a mirar, aunque por el rabillo del ojo ella pudo observar a una niña sentada a su lado, con una edad de aproximadamente 10 años, cabello negro lacio que le ocultaba su rostro, tenía un vestido rosado hasta un poquito más abajo de la rodilla y estaba descalza. Mi prima intentó girar su cuerpo completo para lograr ver bien a la niña pero cuando empezó, el dolor en el pecho se intensificó, no soportantolo cerró sus ojos con fuerza.

A lo que sintió un alivio en el pecho ella decidió abrir los ojos, sentándose de golpe y mirando a todos lados. El ladrido de su perro la sobresaltó pero este anunció fue la llegada de sus padres. Ella olvidando todo y haciendo como si nada, decidió ir a saludarlos.

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