Dᴇsᴛʀᴏʏɪɴɢ ᴍᴇ (Terminado)

𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 18

  

- 2 𝘥𝘪𝘢𝘴 𝘥𝘦𝘴𝘱𝘶𝘦𝘴 -

Las lagrimas salían por mis ojos y no se detenían. Hace dos días que no hablo con él, que no tengo contacto con él y hace dos días siento un vacío interno que no me deja tranquila, me siento más sola que ante, aunque parezca imposible. Ahora todo era igual que antes, mi propósito regreso, y estaba decidida a cumplirla, esta vez sí lograre mi objetivo: MORIR.

Sábado, hoy no tenia nada que hacer, como todos los sábados antes de que aparezca él. "Cállate, basta, supéralo", me decía a mi misma, no podía dejar de pensar en él, la única persona que me brindo una mano para ayudarme, la única persona que estuvo conmigo, que me escucho, pero, lamentablemente, también, de alguna forma, me causaba daño, dolor. Suspire, lo extrañaba esa era la verdad, no podía evitarlo, lo extrañaba, pero por nada del mundo volvería a tener contacto con él.

Decidí ir a ver televisión, necesitaba despejar mi cabeza, sacar malos pensamientos y, si es posible, relajarme un poco. Sábado en la tarde y no hay nada que ver en la tele. Bufe molesta, justamente, un fin de semana y no hay nada que ver. Pensé el leer un libro, pero ya me había leído todos los que estaban en casa y salir y comprar uno no era una opción, y no por flojera, mas bien por falta de dinero. Suspire resignada, lo mejor seria re-leer uno de los libros. Me pare del sillón y fui directo la repisa en donde se encontraban los pocos libros que poseía. Leía los títulos de los libros, viendo cual me apetecía volver a leer, pero fui interrumpida por el timbre. Deje de hacer lo que estaba haciendo y fui a la puerta, abrí, pero no había nadie, mire bien a los costados. Nada. Iba cerrar la puerta cuando vi un sobre en el suelo, el cual tenia escrito "Amanda", lo cogí, volví a mirar a todos lados para ver si había rastro de alguien, pero el resultado fue igual que antes. Nadie.

Me senté en el sillón con el sobre en las manos, me daba curiosidad quien lo había dejado, así que, rápidamente, rompí el sobre y saque la hoja que tenia adentro y empecé a leer su contenido: 

"Querida Amanda, se que hace unos días me dijiste que salga de tu vida, pero espero que comprendas que para mi es imposible. Cuando lo dijiste, créeme, me dolió, me dolió más de lo que pensaba. Te soy sincero, al principio me moleste, me moleste mucho contigo de lo malagradecida que pudiste ser en ese momento, yo te apoye en todo y, simplemente, me dejas, me gritas como una basura. Pero conforme pasaba el tiempo, las horas, me sentía vació, algo me faltaba, algo no estaba bien conmigo, el sentimiento de vació, era muy grande, no sabia que me pasaba, hasta que me di cuenta. me haces falta, te extraño mucho, me haces falta, te necesito conmigo, a mi lado, escuchar tu voz, sentirte cerca. Pero eso me hizo dar cuenta de algo, te quiero, te quiero más de lo que yo pensaba, tu están en mi mente las 24 horas del día. No sé qué te hizo dejarme, no sé qué te hizo pensar que estar conmigo te hacia mal, pero Amanda no te puedes hacer esto, no termines con tu vida así, si quieres no me hables, pero sigue con lo que empezamos no te rindas, tu estas aquí por algo, un propósito. Para terminar, quiero hablar contigo, por favor , si ya no quieres volver a hablarme esta bien, pero al menos dame la ultima oportunidad de verte y hablar contigo. Por lo que más quieras. Te estaré esperando hoy en el muelle a las 6:30 PM, espero que vayas.

Te quiere B"

Algo mojo la hoja, lleve mi mano a mi rostro, estaba llorando, él me extrañaba, me quería. Yo también sentía un vació en mi interior, pero al leer esa carta, algo en mi volvió a nacer, me sentía mejor ¿Por qué? ¿Debía ir a verlo? Mi cerebro debatía entre ir o no, por un lado, algo me decía que debía aclarar las cosas con él, aquel chico siempre estuvo ahí para mi, no era justo dejarlos así. Pero por otro lado mi lado cobarde, me decía que no debía ir, para no meterme en problemas, pero al final solo era porque no quería que Camila me viera con él.

Caminaba rápido por las calles, era mejor llegar antes, no quería arrepentirme después. Si, luego de una larga batalla conmigo misma decidí ir, aclarar las cosas. Vi el reloj 6:15, maldije, no iba a llegar en 15 minutos al muelle. Acelere mis pasos, pero fue en vano, llegue al muelle y no lo vi. En ese momento sentía un vació, unas ganas tremendas de morir, me sentía mal, y lo peor no sabia porque, pero quería morirme en ese mismo momento y al frente mío estaba el mar.-