Me considero una adicta a las redes sociales, son lo que me mantienen alejada de muchas cosas que prefiero ignorar de mi entorno, las peleas de mis padres, el ruido de mis hermanos corriendo por la casa y los sermones de mi madre por el hecho de estar todo el día pegada a la computadora.
Una madrugada de junio, me sorprendió que se abriera un chat con este chico, Luciano, de todas las personas que podría imaginar que me escribiera, él lo hizo, nuestra conversación fue breve, pero la recuerdo tal cual paso:
-Definitivamente eres muy bellaa
-*le envié un emoticón* (no sabía que más decir de lo sorprendida que estaba)
- Te dolió cuando te caíste del cielo? JAJAJA, Doy asco piropeando no es lo mío.
-JAJAJAJA, haces el intento, eso cuenta.
-Si bueno lo intente, ¿Cómo estás?
De pronto dejo de responder, no supe si yo había hecho algo mal, pero lo cierto era que esa conversación no podía quedar así, por lo tanto decidí escribirle y eso fue lo que hice:
-Si me ignoras es chimbo.
-Holaa, ¿Cómo estás? Cómo te fue hoy? Qué hiciste? Cuéntame, no te ignoro mi bella, de verdad.
Hablamos un largo rato, y no puedo negar querer seguir hablando mucho más, le sugerí conocernos y el accedió, le dije que era para ver si aún en persona le parecía bella y se sorprendió por lo directa que puedo llegar a ser a veces (casi siempre); pasaron exactamente 15 días hasta que volví a chatear con Luciano, como toda adicta a las redes sociales, comparto publicaciones compulsivamente, una noche revisando el perfil de mis contactos observe que Luciano había compartido una imagen , decía algo tipo "Quiero sentarme a tomarme un café con alguien y hablarle de mis mañas", no pude evitar escribirle:
-Me hablaras de tus mañas?
-Con café o sin el?
-Con café.
-Apenas usted me diga.
-Mañana?
-Me parece muy bien.
Hablamos de nuestro día, las cosas que hicimos,intercambiamos números, me dio ideas de lo que podíamos hacer... lo único malo detodo es que no pudimos conocernos al día siguiente.
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Enamorarme de él
RomanceEsta es la historia de Luciano y Elisa, la pareja no tan típica de jóvenes, que sin buscar nada, encontraron todo y más el uno en el otro, descubriendo así cosas que desconocían, encontrando un mundo de posibilidades, sin dejar atrás un montón de ad...