Sindrome De Estocolmo

Casualidad

Las patrullas rodearon la Boutique. La noche se llenó de las luces azules y rojas de las patrullas y el sonido irritante de las sirenas. Twilight y Shining armor bajaron de una de las patrullas con apuro. La primera estaba a punto de correr dentro de la boutique de no ser porque su hermano la detuvo.

- Puede que las intrusas aún estén adentro y tengan a tus amigas como rehenes - Shining hizo un gesto con la mano y un número de hombres entró en el lugar - Yo iré también - añadió poniendo una mano en el hombro de Twilight - Tu tranquila.

Twilight al escuchar lo último, comenzó a pensar en lo ridículo e inutil que se escuchaba decir eso en un momento así, y que de seguro Fluttershy había pensado lo mismo cuando le había llamado. Aunque la intención era buena.

La peliazul suspiró y le envío una mirada a su hermano para decirle que estaba bien. Quisiera poder decir lo mismo de sus amigas.

....

Fluttershy abrió los ojos con pesadez. Su cabeza daba vueltas. Al principio no recordaba nada, pero la realidad le llegó de golpe. No sabía en donde estaba y no había señales de Rarity.

Estaba un cuarto de concreto literalmente sin nada, sólo ella junto a los grilletes que aprisionaban sus muñecas a la pared, y una puerta de hierro. No sabía cuánto tiempo había pasado, no sabía qué olor era el que había en ese cuarto, y no sabía el porqué estaba allí, o por qué buscaban a Rarity.

De seguro Twilight y su hermano estaban en su búsqueda en este instante. Shinning es un buen policía, no por nada es el jefe. Sólo esperaba que no pase mucho tiempo en ese lugar.

Las horas pasaron y el hambre llegó, haciéndose imposible de ignorar al no tener con qué entretenerse, sólo sus pensamientos.

Cerró sus ojos soltando un suspiro y pensó, en el refugio de animales donde trabajaba y sus pequeños amigos peludos... y que tal vez no habían comido al igual que ella, justo en este momento le apetecía cualquier cosa del Sugar Cube Corner.

Sacudió la cabeza con frustración. Quería olvidarse del hambre, no provocar aún más.

Sugar Cube Corner....

No debería ansiar dulce cuando tenía hambre.

Pero encerio deseaba hotcakes, o pastel... con mucho glaseado y cerezas decorándolo.

Cereza...

Los ojos...

Fluttershy pensó en la chica que le ayudó con la puerta del Sugar Cube Corner, ese brillo, energía y confianza que expresaban. No sabía si había sido una alucinación, pero juraría que vió esos ojos justo antes de desmayarse.

La puerta de hierro comenzó a abrirse con un irritante chirrido. Fluttershy sintió un pequeño y desagradable escalofrío recorrer su espina dorsal.

Allí estaba de nuevo la chica de sudadera color azul cielo. Al parecer no había imaginado nada, la chica podría ser la misma. Esta vez la joven no tenía la capucha puesta, dejando ver un salvaje cabello arcoirizado, era la representación de un espíritu libre y rebelde.

- Al fin despertaste - habla la chica en tono serio, logrando intimidarla un poco. Fluttershy se da cuenta de que la chica cargaba encima una bandeja con hotcakes algo pasados de cocción y jugo de naranja - Me dieron órdenes de traerte esta comida - dijo acercándose, acelerando el pulso de Fluttershy por el temor. La pelirosada se dió cuenta de que había alguien detrás de la peliarcoiris, pero no dejaba ver su rostro, el cual estaba cubierto por un pasamontañas, pero podía ver unos ojos amarillos, y por la contextura dedujo que era un hombre muy fornido.