Summer Love |Niam Hayne|Historia Corta|

ღEPILOGO, PT. Iღ

"LA BODA DE GREG Y LILA"

El lugar era increíblemente hermoso, el día parecía a su favor, el cielo nublado y pequeños copos de nieve cayendo haciendo todo más blanco. Lila amaba el frio, Greg amaba el frio, así que decidieron casarse en plena víspera navideña para poder tener una boda soñada como ambos se confesaron querían en un tonto juego de "20 preguntas" cuando apenas y se estaban conociendo. El salón estaba adornado con mesas de forma circular, encima tenían manteles blancos e impecables, las sillas eran cómodas y tenían un bonito lazo al mismo color del mantel. Había muchas flores blancas y algunas que resaltaban color rojo, los candelabros, los meseros, la comida, la pista de baile, los músicos y el sin fin de preparativos estaban donde deberían estar. Dio un saltito emocionada y se giró para poder regresar a casa para poder cambiarse, si, no era común que estuviese a esas horas fuera de casa y menos el día de su boda pero las ansias de saber si todo estaba correcto la agobiaban.

Salió del salón hacia el jardín que estaba destellando gracias a los copos de nieve que caían, los árboles se veían lindos y la fuente con luces al lado de un pequeño quiosco que seguramente en la noche se vería hermoso cuando las pequeñas luces de navidad le adornaran, solo complementaban su escenario ideal, volvió a sonreír y salió por fin por el portón del jardín que habían contratado para la boda, iba a subirse a su camioneta pero una molesta y aguda voz le hizo detenerse.

-¡LILAAAAAAA!- La morena cerró los ojos y pataleo el suelo en forma de berrinche, bien, quizá no solo había un pretexto para salir de casa tan temprano. Quizá su cuñado le empujo a salirse de casa temprano.

-¡HOLA LILA!- Niall gritó y se echó a reír cuando por fin llegó hasta la chica, Lila suspiro enfadada y se giró hacia él.

-No, no te llevaré, ya te lo dije- negó mirándole con los brazos cruzados. Era difícil para Niall no reírse cuando Lila se enojaba y hacia esa pose, parecía una nena de diez molesta, Niall sonrió tratando de ser tierno.

-Lila te prometo que será muy rápido... por favor, sabes que no fue mi culpa no pasar el examen de manejo- hizo un puchero y junto sus manos en suplica.

-Ah claro, fue culpa de la pobre anciana a la que arrollaste. Por suerte solo te metió quince bolsazos y se olvidó de las demandas- Lila rodo los ojos.

-Yo frene, que no fuera a tiempo no fue mi culpa- se excusó y después negó -no cambies mi conversación Lila, en serio necesito un aventón. Greg no tiene cabeza para nada y me da miedo cuando esta estresado, mis padres llevaron arreglar sus coches... por favor, por favor, por favor- volvió a suplicar y Lila resoplo con fuerza, odiaba que Niall fuese tan tierno y nadie pudiera negarse a eso.

-Mira rubito, en menos de dos horas tengo que estar en casa para poder salir bien y a tiempo si no quiero que tu hermano me deje por impuntual ¿captas? así que sube y avancemos muy rápido- Señalo con su dedo indicé y Niall sonrió.

-¡YAY! ¡GRACIAS!- saltó sobre sus cuñada y le beso la mejilla, Lila rodo los ojos y le empujo suave para que subieran a la camioneta.

Pronto estaban en marcha, Niall cantaba las canciones que pasaban en la radio y Lila manejaba tranquila por todo Londres. Le daba gracia a la morena ver a Niall tan emocionado, sus ojos azules brillaban más y tenían un color particular, sus mejillas estaban muy rojas parte de la culpa era el frio y otra la emoción. Se había vestido lindo y llevaba un gorro con forma de panda de donde sobresalían dos orejitas negras muy lindas. Lila no podía entender como después de casi un año entero el efecto seguía siendo el mismo, parecía inmune al reloj. Rápidamente llegaron a su destino, Niall bajo de la camioneta sin esperar a su cuñada o lo que tuviese que hacer, Lila rodo los ojos por décima vez en esa mañana antes de cerrar todo y correr detrás del pequeño hermano de su prometido.