LA SUBASTA

Capítulo 3: "Cumpliendo el castigo"

Un nuevo día amanecía en la capital en una lujosa mansión un joven cabello de flama se alistaba para ir al instituto con una gran sonrisa plasmada en el rostro. El joven termino de alistarse y bajo rápidamente a desayunar con su familia.

¿A qué se debe tanta alegría?, dijo con curiosidad su padre al ver el rostro de felicidad de su hijo.

Si hijo, ¿por qué comes con tanta prisa?, dijo su madre viendo al joven morder su pan y beber su desayuno rápidamente.

Es que hoy es un gran día y no me quiero perder por nada del mundo ser el primero en ver a Son cumpliendo su castigo, por eso tengo que apurarme para llegar temprano, dijo Vegueta riendo.

Hay hermano, de nuevo tú y tus disputas con Gokú, dijo Table.

Pues sí, pero esta vez yo no tuve nada que ver, el castigo se lo gano solito, dijo Vegueta riendo irónico parándose de la mesa, despidiéndose de sus padres y hermano para ir hacia su moderno auto y partir al instituto.

Minutos después: "Instituto Dragón"

Un joven de cabello alborotado se encontraba limpiando la piscina del instituto cuando sintió un flash sobre su cuerpo, el joven levanto el rostro y se encontró con el joven de cabello de flama que sonreía irónico mostrándole su moderno celular.

Dame eso, dijo Gokú furioso saliendo de la piscina.

No te daré nada querido Kakaroto, además para que lo quieres ya lo subí al facebook dijo Vegueta riendo.

Desgraciado, dijo Gokú intentando golpearlo.

Vegueta retrocedió y le dijo moviendo una de sus manos, yo que tú no me meto en un nuevo lío.

El timbre sonó y aprovechando el desconcierto del joven de cabello alborotado, Vegueta salió del salón de natación y se fue a su aula.

Minutos después: "Aula de marketing"

Gokú entraba a su aula cuando sintió murmullos y risas a su alrededor, mientras subía a paso rápido hacia donde estaba su amigo, escucho.

Vaya castigo que le dieron, decía una voz mientras reía.

Es lo que merecía dijo otra voz muy dulce que él reconoció rápidamente y giro su rostro para ver a las jovencitas que murmuraban sobre él.

Gokú miro a la bella jovencita pelinegra con una mirada de decepción la cuál luego se torno fría, el joven prefirió no decir nada para no emporar su situación, entonces decidió continuar su camino hasta donde se encontraba su amigo.

¡Hola Krilin¡ dijo el joven de cabello alborotado sentándose junto a él.

¡Hola amigo¡ dijo Krilin con tristeza.

No entiendo porque siento como si todos murmuraran de mí, dijo Gokú.

Porque eso es lo que está pasando dijo Krilin con tristeza mostrándole su celular con la foto que Vegueta le tomo en un fotomontaje (dónde Gokú aparecía con un pañuelo en la cabeza y mandil) y con una frase que decía: "la nueva cenicienta del Instituto Dragón".

Ese estúpido me las va a pagar, dijo Gokú.

Cálmate, ese idiota lo que quiere es provocarte para que te expulsen, no le des el gusto, dijo Krilin.

Si tan solo pudiera asistir a las clases de artes marciales para romperle la cara, dijo Gokú furioso.

Ya te vengarás cuando regreses dijo Krilin.