capítulo 20: "Epílogo"

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5 años después:

Una bella joven pelinegra se encontraba terminando de arreglarse en su habitación, cuando de repente la puerta de esta se abrió y entro corriendo por ella un pequeño niño de aproximadamente 3 años.

Gohan, cielo, ¿y papá?, decía la pelinegra alzando a su pequeño en brazos y cubriéndolo de besos.

Ahí está, decía el pequeñín señalando a la puerta.

¿Ya estás lista amor? dijo Gokú entrando por la puerta de la habitación y quedando embobado al ver a su bella esposa que a pesar del tiempo seguía tan hermosa y con una figura envidiable que ni parecía ser ya madre.

Si, ya estoy lista, dijo la pelinegra sacando de su ensueño a su atractivo esposo.

Entonces vamos a casa de mis padres para que se queden con Gohan, dijo Gokú.

Si vamos, dijo la pelinegra que llevaba puesto un bello traje de noche color negro que resaltaba su bella figura.

Minutos después:

Vayan tranquilos, diviértanse, decía la madre de Gokú tomando al pequeño Gohan en sus brazos.

¡Gracias mamá¡ por hacerte cargo de Gohan, dijo Gokú.

Hijo, ya sabes que a mí me gusta mucho cuidarlo, dijo su madre riendo.

Gokú y Milk se despidieron de la madre del joven de cabello alborotado y subieron al auto para partir.

En el auto:
¿A quién fue que se le ocurrió una idea así para el reencuentro?, decía Milk sonriendo.

A Krilin, dijo Gokú.

Una subasta, ¿Y favor de quién van esta vez los fondos?, decía la pelinegra.

Serán donados para el aniversario del Instituto, por eso todos nosotros los que fuimos parte de esa generación subastaremos hoy algo, dijo Gokú sonriendo.

La pelinegra abría la cajuela del auto de su esposo para dejar unas llaves allí cuando encontró algo que llamo su atención. ¿Aun la conservas?, pregunto la joven.

Si es mi amuleto, dijo Gokú sonriendo.

¿Y qué subastaras tú amor para comprarlo?, dijo la pelinegra sonriendo.

Una medalla que gane en el campeonato estudiantil, dijo Gokú estacionando su auto frente aún local que se encontraba bastante iluminado.

Ambos jóvenes bajaron del auto y escucharon a sus espaladas:

¡Gokú, Milk¡ qué bueno verlos de nuevo, decía una linda joven peli azul que se encontraba del brazo de un joven cabello de flama.

¿Cómo va tu embarazo?, dijo la pelinegra acariciando el abultado vientre de la peli azul.

Este muchachito es muy activo, me patea todo el tiempo, decía sonriendo Bulma.

¿Y ustedes dos cómo han estado?, dijo Vegueta mirando a los pelinegros.

Felices y con mucho trabajo, dijo Gokú.

¿Y Gohan?, dijo Vegueta.

Se quedo con mis padres, dijo Gokú cuando alguien se acerco hacia ellos.

Chicos que bueno que ya llegaron, pero pasen decía el calvo.

¿Y Dieciocho?, pregunto la pelinegra.

A dentro, ella se encargara de realizar la subasta, dijo Krilin.

Los jóvenes entraron y se sentaron juntos en una gigantesca mesa en donde se reencontraron con sus amigos del instituto y juntos compartían hermosos recuerdos vívidos en aquellos años.

Horas después:

¡Felicitaciones chicos¡ la subasta fue todo un éxito, dijo Piccolo.

¡Gracias rumbo ven de cabello alborotado y subieron al auto para ir rumbo ura.

a todos por su apoyo¡ no hubiésemos podido lograrlo sin ustedes, dijo Dieciocho sonriendo.

Entonces hagamos un brindis por el éxito de esta subasta y por nuestro reencuentro, dijo Yancha mientras todos los jóvenes levantaban sus copas y decían salud chocándolas entre ellas.

Minutos después:

Varias parejas bailaban al centro de la pista:

Qué bueno que todo salió bien, decía Krilin mientras bailaba con la rubia.

Si amor, todo fue un éxito y eso me hace feliz, dijo la rubia.

Dieciocho, creo que ya llego el momento, dijo el calvo.

¿El momento?, dijo la rubia.

Sí de que me respondas la proposición que te hice hace 6 meses, dijiste que cuando terminemos con esta actividad me darías la respuesta dijo el calvo.

Si, tienes razón, dijo la rubia sonriendo.

¿Y cuál es?, dijo Krilin intrigado.

Que si acepto, que si acepto casarme contigo dijo la rubia besando en los labios a su novio.

Mientras tanto Bulma y Vegueta bailaban lentamente:

Si te sientes mal avísame, decía el joven cabello de flama sonriéndole a su esposa.

No te preocupes mi Vegui estoy bien, pero si nos sentimos mal te lo haré saber cariño, dijo la peli azul mientras Vegueta acercaba su rostro para besarla apasionadamente.

Mientras en una de las mesas un par de pelinegros miraban abrazados a sus amigos bailar:

Quien hubiera pensado que nuestro amor al igual que el de ellos nació en una subasta, decía la pelinegra sonriendo mirando a sus amigos bailar.

Gokú solo sonrió y tomo el rostro de su esposa con ambas manos y la beso con ternura y pasión, luego de unos minutos tomo su mano y la llevo al centro de la pista junto a sus amigos. El joven miro al encargado del sonido y este coloco una canción que la pelinegra siempre recordaba.

Esa canción es la misma que bailamos el día que tú me compraste en la subasta, dijo Milk sonriendo.

Pensé que no te acordarías, dijo Gokú riendo.

Pues ya ves que sí, "Siempre serás mi destino", dijo Milk colocando su cabeza sobre el hombro de su amado y bailando apegada a él.




FIN



Nota:

Los personajes usados no son míos son creaciones de el gran Akira Toriyama.

Gracias a todas aquellas personas que siguieron, votaron y escribieron sus comentarios para esta bella historia de amor GoChi y con algunas otras parejas más, a la cual me fascino escribirla.

Les invito a seguir leyendo mis nuevas historias, así como a mis nuevos seguidores a leer mis otras historias terminadas y las nuevas, que espero y sigan siendo de su agrado.

Todas mis historias son creadas con mucho cariño para ustedes.

PrincesaLirio.


LA SUBASTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora