Segunda temporada.

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Llegó el gran esperado último día de enero.
12 días para irme a las Bahamas.

-¡¡Amor llegue!!- la voz de Dani sonaba en todo la habitación.

-¡¡Arriba!!- grite para que subiera.

-Firme con los Giants- mi sonrisa se borro.

-Esta comenzando apenas la temporada ¿ y mis vacaciones?- digo algo caprichosa.

-Amor, iremos cuando termine, es una gran oportunidad- suspire.

-Perdona, tienes razón, ese siempre a sido tu sueño, y yo soy muy egoísta- hice un puchero, y salí de la habitación, me sentía mal, de verdad tuve que pensar en el.

Tomo mi bolso y camino hasta mi auto.

Marco el numero de Sara y a los tres pitidos contesta.

-Hey, pensé que habías muerto- reí

-E estado ocupada con la empresa y las sesiones de foto, los patrocinios y esas cosas, ¿quieres almorzar conmigo?

-¿En el Sergie?- lo pensé por un momento y acepte.

-Si, en el Sergie, llega pronto perra- reí y tranque.

Me estacione y baje del auto, los paparazzis me bombardeaban con fotos.

Me sente en un mesa y saque mi móvil, entre en Snapchat y me tome un par de selfies.

-Deberías usar el de florecitas, queda mas nítida la foto- Sara planto un beso en mi mejilla y se sentó en la silla que estaba en frente de mi.

-¿Como va todo con Sean?

Sean es el novio de Sara, es jugador Giants, es demasiado cariñoso con Sara, ella lo ama, y el también a ella.

-Bien, me dijo que Dan firmo un contrato con el equipo- asenti mientras bebía un poco de agua.

-es raro, nada de esto es algo normal, digo va a ver mas atención y eso no es raro, pero no se, siente algo raro- digo mientras miro mis uñas en un acto ansioso.

-No vas a estar sola, te voy a presentar a mis amigas, todas son esposas o novias de algún atleta, desde Béisbol hasta fútbol americano, es mas vamos a invitarla.- negué rápidamente sólo quería paz.

-Quiero paz Sara, estoy algo estresada- digo y ella asiente.

-Pero ellas te van a ayudar a conocer mas este negocio, mira Sasha tiene 5 años casada con Gary, y ella sabe por lo que vas a pasar, la llamare luego.

-Bien, yo iré al baño, ya vengo.

Unos minutos después me encontraba mirandome en el espejo.

***

-Shay pedí una ensalada de frutas para las dos ¿Está bien?-Asentí sin preocupación.

-Creo que es extraño, Dani comenzará a viajar más, pasare más tiempo sola a lo cual no estoy acostumbrada.

-A todas pequeña, nadie se acostumbra a este mundo, la meta es lo que tu tienes una exitosa carrera, un atleta como pareja y la carrera es por el anillo y tu ya tienes el anillo, así que solos tendrás que acostumbrarte a los eventos y juegos, y a tener hijos.

Al escuchar hijos mis nervios aumentaron.

-No te asustes tienen solo meses de casados, estarás bien, el no te presionará y créeme el tiempo pasa rápido cuando se trata de tu esposo- dice y yo asiento.

-Por otro lado ¿Viste que Logan a estado participando en algunas campañas de modelaje?- la mire extrañada y negué.

-¿En serio? Wow, que bien por él- sigo mirándola y pronto tenía la ensalada frente  a mi.

-Creo que esta tratando de cambiar- seguí asintiendo pero solo no podía escucharla, no quería.

-Para, no quiero hablar de Logan, quizás en otro momento, pero por ahora, sólo quiero paz y tranquilidad- ella cerró la boca y se dispuso a comer, aún con los flashes de los paparazzis.

***

Dani estaba sentado a mi lado, mientras veía algo en su computadora, habíamos cenado juntos y justo ahora solo queríamos descansar, ignorando por completo la invitación de la hermana de Daniel.

-¿Logan sabe que tiene una hermana?-la pregunta salió de mi boca sin yo si quiera querer.

El se volteo hacia mi y cerró su laptop antes de dejarla a un lado, su rostro estaba confundido, pero pronto se relajo y paso su brazo por mis hombro, para atraer me hacía si.

-No, creo que nunca se lo dije, después de todo nunca hablamos luego de la muerte de mamá, Jane tenía 18 años, pero nunca quiso buscarlo- asentí y le sonreí mientras me acurrucaba a su lado.

-Te amo- le digo y puedo jurar que escuche como su corazón comenzaba a latir muy rápido.

-Y yo a ti- besa mi coronilla y comienza a bajar por mi cuello.

-D-Daniel...-respire de manera agitada y podía sentir como mi cuerpo comenzaba a calentarse.

-Amor- dijo con el mismo tono que yo había utilizado.

Su mano había bajado por mi camisón dejando un camino de caricias hasta el comienzo de mis panties, su dedo había comenzado a juguetear con el hilo de mi panties, para así seguir más abajo, mordió levemente el lóbulo de mi oreja, para seguir besando mientras bajaba, estaba muy mojada, tenia muchas ganas de estar con él como hacía tiempo no lo hacía, sus dedos no tardaron de jugar con mi feminidad, pronto salían y entraban de mí, arrebatandome gemidos, alguno que otro rasguño pero más que todo muchos jadeos.

-A-Amor- jadee cuando estaba casi llegando a mi clímax, mi corazón había comenzado a latir mucho haciendo que mordiera y masticara mi labio.

-Sólo unos segundos ¿Si?-asentí y vi como se levantaba, dejando sus pantalones en el suelo, quedando completamente desnudo, en sus manos ya hacia un condón gracias a que yo había dejado las pastillas hacia unas semanas por cuestiones médicas.

Unos segundos más tardes estaba encima de mi, había colocado su boca encima de la mía, besándome fuertemente, mordiendo mi labio inferior, besándome con lujuria y sonriendo cuando notó mi mano en su bulto.

-Si no lo haces tú, lo hago yo- digo sonriendole y recibiendo un casto beso como respuesta.

-Te amo tanto- murmura en mi oreja.

-¡Sólo entra!-lo miré desesperada para luego mirarlo sorprendida, había entrado muy rápido, dejándome boquiabierta cuando comenzó a moverse.

Él delicioso vaivén que me envolvía me había sacado gritos guturales, sus manos estaba en mi cintura aprentandola para poder entrar mejor, dejando uno que otro beso en mi mejilla, sus gruñidos hacían de mi un meollo de gemidos.

-E-Estoy muy cerca- jadeo y grito muy fuerte cuando en una segunda estocada me había hecho llegar, haciéndome morder mi labio hasta sentir el sabor metálico y rodar los ojos muy fuerte.

-Ya casi llegó bebé- su mano subió mi pierna a su hombro, dando más estocadas que ayudaban a alargar la sensación orgásmica que estaba experimentando en ese momento, no faltó mucho para escuchar un gruñido dejando su cuerpo caer junto al mío.

-Eso estuvo muy bien- dice pasando su mano junto a la mía.

Vi como se levantó algo cansado, tiro el látex a la basura y volvió hacia mi, con el pantalón de ratas azul.

-Debemos dormir bebé, mañana comienzo los entrenamientos- a sentí muy cansada, tenia mucho calor así que pronto estaba a su lado, solo en panties, apuntó de dormir.

-Buenas noches cielo- beso mi mejilla y paso su brazo por mi cintura.

-Te amo ratoncito- beso su hombro y pronto caigo dormida.

En lo brazos de la persona que nunca me haría daño.

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⏰ Última actualización: Oct 01, 2018 ⏰

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La hija del mafioso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora