Acampando

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        ×Sin spoiler pero con una leve referencia a los principios del arco del Imperio Álvarez.

«Gray se moría de calor, pero Juvia tiritaba cómo si la vida le fuese en ello.»

En mitad de la noche Gray había escuchado a alguien entrar en su tienda de campaña, en un principio el mago de hielo se puso en guardia por si resultaba ser un atacante. Pero sólo era Juvia.

—¿Juvia? ¿Qué pasa? —preguntó extrañado.

—Gray-sama... Juvia se muere de frío y se pregunta si puede dormir contigo.

Gray se quedó paralizado unos instantes, ahora que la veía bien podía afirmar que la maga de agua tiritaba. Desafortunadamente para Gray ellos estaba solos en la misión y su saco de dormir no era de dos plazas cómo el que Juvia llevó una vez. Iba a morir de calor, pero no podía dejar que Juvia muriese de frío.

—Ven, supongo que dormiremos juntos.

Juvia asintió, si no fuera por el frío en esos momentos estaría muy feliz y sonrojada por dormir con el hombre que amaba.

Y sí, como el mago de hielo había esperado, se estaba muriendo de calor, pero no podía negar que le preocupaba más el temblor de Juvia y, además, que la sensación de dormir abrazado a ella era agradable.

A lo largo de la noche la situación fue cambiando, una dormida Juvia había dejado de tener frío y un dormido Gray había dejado de morirse de calor.

Cálidos días de lluviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora