Pero, curiosamente, aquí ninguno de los dos se mordió la lengua:
-Venimos de OldTown -contestó, sin miedo, William.
-Un pequeño pueblo muy lejos de Barcelona -siguió Anna.
-Oh, vaya... Nunca he oído hablar de él -dijo, un poco confusa, Clara.
-Ya, ni yo -dijo Maria.
Yo estaba callada, por si acaso... Nunca se sabe cuándo una va a meter la pata.
Hubo un silencio bastante incómodo, hasta que dije:
-Bueno... Creo que es hora de ir a casa. Nuestras madres estarán preocupadas.
-Sí, es cierto. Nosotras nos marchamos.
Antes de que nos marcháramos, Clara me susurró muy flojito al oído:
-Tenemos que hablar.
Después de eso, nos despedimos con un fuerte abrazo y un beso.
Ellas se fueron por un camino y nosotros por otro, pero no sabía qué hacer con esos dos...
-Ey... ¿Y ahora qué? No tenéis ningún sitio donde podáis quedaros.
-No te preocupes. Tenemos una solución...
-Como tú sabrás, Lia -continuó, misteriosamente, William-, nosotros no venimos de este Mundo. Tú, Clara y Maria habéis entrado en él de una manera que desconocemos.
-PERO -exclamé- en OldTown solo he estado yo, ya que Clara y Maria tenían otra misión. Todo esto empezó al descubrir una "palanca" en la pista de hielo de nuestra ciudad, y, desde entonces, verla en todos lados. Lo extraño es que éramos las únicas. -Hice una pausa- Cuando decidimos abrirla, esta nos llevó a un Mundo totalmente diferente al nuestro. Ahí conocimos a Pinky, la Princesa del Reino donde estábamos...
-Lia... Lo que nos estás contando... ya lo sabemos.
-¿Cómo? ¿Me estáis diciendo que lo que os acabo de explicar no ha servido de nada?
-Eh... Sí -me contestó William, sin cortarse.
-El caso es que nosotros ya sabíamos que iba a pasar todo esto.
-¿Qué quieres decir?
-La misión que os dijo Pinky a Becca y a ti, ya la sabíamos. Y la última misión... es donde nosotros te pusimos a prueba.
-No sé si os estoy entendiendo... -Dudé.
-Nosotros, Lia -dijo William- estamos igual que tú.
-¿Qué? ¿Qué quieres decir?...
-Nosotros también estamos buscando nuestro pasado, Lia. Pinky también nos ayudó... y también somos hadas como vosotras cuatro.
-Pero, entonces... ¿qué estabais haciendo en OldTown? -El cerebro me estaba a punto de estallar- Y, Anna... ¿por qué te encontré en ésa habitación de ése modo?
-Ah, eso... Es porque Pinky me había dicho que lo hiciera así.
-¿El qué?
-¡La misión, Lia! -Gritó.
-A ver, Lia -empezó a hablar William-. Veo que no lo estás entendiendo. Mira, te lo resumo: Anna y yo somos dos personas como tú y las demás, las cuales no sabemos absolutamente nada de nuestro pasado. ¿Hasta aquí lo entiendes?
-Sí...
-Nosotros -continuó Anna- también tenemos una familia; con la cual, nos "han contado", hemos crecido. La realidad es que... no es así. Nuestra verdadera familia no la conocemos. Y eso qué quiere decir: que estábamos viviendo una mentira tras otra.
-Pero -continuó él- eso no lo "supimos" hasta que conocimos a Pinky, nos pasó lo mismo que os pasó a vosotras tres... y nos dio la oportunidad de vivir en OldTown. Solos.
-Pero, Anna. -Dije- Tú me habías dicho antes que siempre has vivido sola...
-Je, je... Pues te he mentido. -Se rió.
-Hua... Tengo muchas dudas en la cabeza, chicos... -Dije- He entendido lo que me habéis dicho, pero... sigo sin saber por qué.
-¿Por qué... el qué? -Preguntaron los dos a la vez.
-Por qué me está pasando a mí todo esto.
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El Portal Mágico 2: Si Todo Fuese Tan Fácil...
Fantasy¡¡Aquí estamos con la continuación de la primera historia (El Portal Mágico: Un Lugar Llamado "Mundo")!! Esta vez, Anna y William, como ya sabéis, vienen al "Mundo real", y se instalan en el mismo Instituto que Lia. Parece ser que Anna conoce a Wil...