Capítulo 3: ¿Estoy muerta, Justin?
—Justin...–Le llamo.–Lo siento, lo siento tanto.–Mi voz se quiebra y enseguida estoy llorando.
—¿Por qué? Mi Amanda, no llores, por favor, mi pecho duele cuando lloras.–Justin se queja y posa delicadamente sus manos en mis mejillas, limpiando mis lágrimas con sus pulgares.
—Lo siento Justin, siento haber abrazado a Jason, lo siento tanto.–Lloro y Justin entreabre sus labios, y sin decir nada, me abraza, me aferro a sus brazos, como si fuera a caer.
—Mi amor, tú no tienes culpa de que mi hermano te haya persuadido, sé que no lo has hecho con mala intención, mi pequeña, no llores más.
—Pero esque...siento que todo esto es mi culpa.–Susurro y el silencio comienza a reinar.
No es un silencio incómodo, sino tranquilo y relajado.
—Mi Amanda.–Me llama Justin elevando mi cabeza.–¿P-Puedo ha...hacer algo?–Asiento.
—¿El qué?
—¿Podría besarte?–Tartamudea Justin en un susurro, me quedo en silencio.–Lo siento, mi amor, se qué no debería ha...–Interrumpo a Justin, poso mis labios sobre los suyos, son suaves, dulces y tímidos.
Justin solo mueve sus labios al compás de los míos, hasta llevarme al ritmo de los ángeles.
Al separarnos, me veo reflejada en los claros ojos de Justin.
—Estoy tan feliz, Amanda.–Susurró Justin, y una tímida sonrisa apareció en sus labios.–Tus labios se sienten mejor que en mis sueños.–Justin me abraza y me levanta con él.–Te amo, mi Amanda.
Y después, Justin me hizo el amor entre besos y las lágrimas de Justin.
—¿Por qué lloras, Justin?–Pregunté, aún desnuda y abrazada a su pecho.
—Son lágrimas de felicidad, mi amor, saber que te he hecho mía me hace feliz, te amo tanto, mi Amanda.–Sonrío delineando todos los tatuajes del pecho de Justin, él tiene muchos, pero todos son hermosos.
Pensé nuevamente, Justin me había hecho suya, y eso, de alguna manera, me llenaba de felicidad.
Puede que yo también esté enamorada.
—¿Estoy muerta, Justin?
