Victoria
Intente resistirme a ella, pero no pude.
Termine invitándola a fumar un cigarrillo¿Aceptaría?, claro que si, soy irresistible.
La chica estaba notablemente borracha, lo sabia por su forma de hablar y de caminar, también por él olor de su boca, olía a vodka.
Pero al verla mirarme no pude contenerme a esos ojos color dorados.
Tenía una figura impresionante, y ese vestido la favorecía bastante.-No vas a asesinarme y tirar mi cuerpo por ahí, ¿cierto?- preguntó- cuando ya estábamos fuera del gimnasio techado.
- No haré nada que tu no quieras- la mire sonriendo traviesamente, a lo cual ella se sonrojó un poco.
Saque mi malgastada cajetilla y le tendí un cigarro a lo cual ella saco uno dudosa. Sostuve uno y lo encendí, acerque él fuego al suyo, que ya tenía en los labios.
Me miro a los ojos mientras lo encendía
¿Me estaba provocando?
En sus movimientos se veía que me estaba coqueteando, era evidente.
No necesitaba tener alguna clase de poder para darme cuenta, la chica era muy obvia.
-¿Como te llamas?- pregunte acercándome
- América.- dijo alejándose, pegando una calada a su cigarrillo.
- América... Lindo nombre.
-¿Y tú?.- dijo simplemente obsoleta, más bien ebriedad, creo yo.
- Victoria.- me acerque a su rostro para decírselo.
Sentí como temblaba y lo disfruté, nunca me aburriría de esto.
Como estábamos en un gran pasillo caminé a un lugar más... privado, para conversar.
No pude evitar una sonrisa ante ese pensamiento.
Ella me seguía. Me sentía extraña, con una sensación de culpa, aún que no se muy bien la razón, como si yo tuviera la culpa de que ella me siguiera. Aunque en cierto modo la tenía, pero no podía evitarlo.Me detuve cuando llegamos a la enfermería de la universidad. Puesto que esta no tenia seguro solo entré, sintiendo como ella también lo hacía, cerrando la puerta tras de si, apoyándose con sus manos en su espalda.
Al ver que no se movía de aquella posición me acerque a ella, tomándola de la cintura, pegando aún más nuestros cuerpos.
No hice nada, solo la miré de cerca, con la oscuridad inundando la habitación, su respiración era algo agitada y podía sentir su corazón latir fuerte.Me acerque poco a poco a su rostro, ella captando mis intenciones puso una de sus manos detrás de mi nuca, él tacto hizo que una electricidad recorriera mi cuerpo, hace mucho tiempo no sentía tanta atracción y eso me hacia sentir ¿confundida?.
Me acerque más a su rostro, se mordió él labio, haciendo perder por completo mi cordura.
Finalmente la besé, primero lentamente, cuidadosamente, sintiendo sus labios cálidos contra los mios fríos.
Nos separamos por falta de aire.
La miré, miré aquellos ojos dorados que me entregaban paz en ese momento.
Esta vez fue ella quien me beso, mas ferozmente, sentía un ardiente fuego penetrando en todo mi cuerpo. Junté mas nuestros cuerpos sintiendo sus grandes senos chocar conmigo, así ella soltando un suspiro.
Me agarró del cabello, reteniendome.
A penas buscamos la camilla, cuando la toqué con mi espalda la di vuelta de tal modo, de que ella quedara sobre esta.
Escuchaba como su corazón latía fuertemente, descontrolándome más aun.
¿Podría resistirme?-------------------------------
!Hola!, ¿qué tal chicos?.
Esta es la primera nota de autora, espero que los pocos que han leído este intento de novela la hayan encontrado agradable, y recuerden! Un comentario o un voto nunca está de más :D
Me gustaría saber que a alguien le gusta lo que escribe esta muchacha traviesa -oh cielos, de verdad que estoy emocionada por los capítulos que vienen-
Sin más me despido, besos💟

ESTÁS LEYENDO
Siempre la misma luna.
Rastgele¿Serías capaz de dejar todo por amor? Incluso a tu propia sangre, todo por algo que podría solo ser pasajero... Dicen que no demos todo por una persona, yo creo que esto lo dicen las personas carentes de amar. Por ti, atravesaría mares, lo daría to...