Siempre la misma luna.

3

América

- no crees que es demasiado, Sara?.- pregunté mirándome en él espejo.
Cuando accedí ir a la fiesta y que Sara me arreglara, no pensé que quedaría... Así.
El vestido que ella había comprado era uno que me llegaba a mitad del muslo, con un gran escote, que por él volumen de mis pechos se veía bastante... Probocarivo, era apegado al cuerpo en la parte de los senos y más suelto después, color negro. Era sencillo, pero provocativo, una mezcla un poco extraña.

- no, esta perfectamente bien.- me miro de arriba a abajo satisfecha.
El maquillaje no era demasiado exagerado, solo una mascara de pestañas con un labial morado oscuro, casi negro.
Estuve a punto de echarme para atrás y no ir a la fiesta, pero no lo hice, tal vez quería salir de la rutina por alguna vez y adentrarme en él mundo por él cual los adolescentes se vuelven locos.
Me sentía fascinada pues nunca antes me había vestido tan femenina y no lo sé, quizá me gustaba sentirme bien, quizás me gustaba sentirme linda...
Me aburría que Sara hiciera puchero cada vez que se hacía el deliniado y le volvía a salir mal, pues se pasaba de histérica y emitía un pequeño gruñido de queja. 
Escuche un grito de celebración por parte de Sara, y así pude saber que había por fin lograr hacer él delineado perfecto.

-¿quedaron iguales?- pregunto mirándome a los ojos, con cara coqueta, lo cual la hacia ver ridicula.  reí un poco.
- que sí, podemos irnos ya? Antes de que me arrepienta- dije con tono amenazante, no quería que notara mi entusiasmo por ir a aquella fiesta.
Siempre digna señores.
- si, ahora viene la peor parte, lograr sacar a Ethan de la habitación.
Puse cara de susto, Ethan si era cosa seria.

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