BROKEN©

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A veces al despertar tenemos un presentimiento algo peculiar...
que nos indica que algo en nuestra vida cambiara...

Un par de  golpes fuertes despertaron a Jake, después de salir del Restaurante inmediatamente volvio a su departamento y se quedo profundamente dormido sin asearse ni cambiarse de ropa.
Eran alrededor de las 8:15 am.
«¿Quién rayos puede ser a esta hora?»
Pensó mientras se levantaba y se dirigía hacía la puerta.
Al abrirla se encontro con una muy enrojecida y molesta Adriana.
-¡¿Dónde estabas Jake?!
¡Vine a a buscarte ayer por la tarde y no te encontre!
Adriana empujo a un lado a Jake para poder entrar, no quería hacerle una escena a su hermano afuera.
-¡Te llame mil veces!
¡¿Qué carajos te pasa por la cabeza?!
Jake busco su celular en su bolsillo, lo tomo y se dio cuenta que lo había dejado apagado desde ayer.
-Calmate Adriana, por favor.
Ella suspiró.-trate de llamarte para recordarte que ibamos a desayunar los tres juntos...
Jake hizo una mueca, su madre les hizo prometer que todos sus hijos  pasarían el mayor tiempo juntos, para que la familia no quedara «rota».
-¿Y entonces?¿Dónde esta?
Adriana cambio su expresión molesta a una triste y bajo un poco la cabeza.-dijo que no podía ...ya sabes...cosas de negocios.
Jake apreto los ligeramente los puños, odiaba que su hermano hiciera eso, era un insensible, a él ya no le importaba si lo lastimaba o no,pero heria a Adriana, y Jake no podía permitir eso.
-Jake,¿Dónde estabas ayer?
Él encogió sus sus hombros.-Sólo conseguí un empleo.
El rostro de Adriana cambio completamente ,una gran sonrisa se asomó por su rostro, avanzo hacia él y se lanzo en sus brazos.-por fin esta sucediendo, estas avanzando estoy tan feliz.-lo dijo mientras estrujaba al pobre muchacho.
-Adriana....me asfixias.
-Lo siento.-dijo aún con la sonrisa en su rostro.-te ayudare a preparar el desayuno, no querrás llegar tarde en tu primer día.
-¡Maldición!ya es tarde ire a bañarme.

*****

10minutos después Jake estaba du hado y cambiado, su hermana lo esperaba en el comedor con delicioso desayuno.
Conversaron un poco, sobre ella y como le estaba llendo, pues estaba en la carrera de Periodismo, gracias a una beca, era muy lista, era la persona más lista en el mundo para Jake.
Claro porque era su hermana y él la amaba mucho.
-Adriana debo irme y llegaré tarde.-dijo mientras comenzaba a levantar su plato.
-Jake dejalo así yo ordenare, debes irte.
Le sonrió a su hermana y le dio un beso en la mejilla
Él tomo su guitarra, su billetera y se encamino hacía la puerta.
-Jake....
Dio media vuelta para mirarla.
-Olvidas tus llaves.-le dijo al mismo tiempo que las arrojaba y eran atrapadas por él.
-Gracias Adriana.
Y salió del deparatamento.

****

-Llegas tarde.
-Richard lo siento, pero son solo unos minutos de retraso.
-No hay excusa, necesito enseñarte lo más pronto posible antes de irme a la Universidad.
-Bueno pues comencemos.

Richard lo instruyo para el manejo de los alimentos, los pasos de higiene, como preparar las bebidas y como atender adecuadamente a los clientes.
Le contó a Jake que estaba estudiando para ser ingeniero civil y que sus  estudios consumian mucho de su tiempo, y por ello no podría ayudarle mucho  a su madre.
-Necesito 2 meseros más, aparte de ti y de mi, pero por ahora solo tendra que bastarme contigo.
-Haré todo lo que sea posible.
Lo miro seriamente.-Eso espero, porque de no ser así, te echaría en el acto.
Jake quedo mudo.
-Ahora toma.-Richard le entrego varios folletos.-Como te dijo mi madre, ya no hay mucha clientela, debes salir a promocionar el lugar...y por lo que más quieras haz este trabajo bien.

*****
Un frío viento azotaba la ciudad, era época de invierno y  Jake repartía folletos en las calles alrededor del Restaurante, lo que era algo difícil pues el aire parecia querer llevárselo a él,  se las entregaba a personas que pasaban junto a él o los colocaba en los parabrisas de los autos.
En un momento dado iba caminando en una calle muy concurrida, contando los pocos folletos que le faltaban, hasta que una ráfaga de viento llevo una bufanda a su rostro cubrio, lo que le hizo soltar algunos folletos.
Sintio como una o dos personas chocaban con sus hombros, escucho un insulto de una voz femenina cuando por fin se quito aquella prenda se encontro con un par de ojos color gris.