BROKEN©

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Era una chica
La chica dueña de esos interesantes e inusuales ojos.
-¡Rayos!Debi haberla ajustado mejor.-dijo mientras se recogia un mechón de cabello detrás de su oreja.

Jake no contestó seguía mirando sus ojos.
-¿y bien?....
Se rompió el hechizo que lo atrapo.
-Lo...lo siento¿Qué querías decirme?
La chica le sonrió.-¿Vas a devolverme mi bufanda?
Jake lentamente miro sus manos, en una tenía unos cuantos folletos y en la otra una bufanda color lavanda.
-Aqui tienes.-dijo mientras se la entregaba.
La chica volvio a colocarsela.-¿Podrías darme uno?.-dijo mientras señalaba los folletos.
-Claro.
Lo tomo y comenzo a leerlo, para despues volver a cuestionar a Jake.-¿Trabajas allí?
Jake asintió.
Observo a su alrededor y vio como los folletos que se le habían caido eran aplastados o ensuciados por las personas que caminaban a su alrededor.-Carajo, Richard va a matarme.
-¿Richard?¿Es tu jefe?
-Algo así
Otra sonrisa aparecio en el rostro de ella.
-Bueno tal vez vaya alguna vez y le explique que sucedio.
Jake lanzo un suspiro.-Estaría salvado.
Ambos soltaron una pequeña risa.
-Sabes...Debo irme, hay cosas que hacer pero espero verte pronto.-dijo mientras hacia un gesto de despedida.
-Ehh...Igual..Igual yo.-respondió el con dificultad para articular sus palabras, no pudiendo creer que ese momento hubiera llegado a su fin.
Jake se alejó unos cuantos metros para volver a deterse y verla irse, vestía un pantalón negro, un sueter blanco y un simpático gorro que hacia juego con su bufanda.
Su cabello era largo y de un color castaño y su piel blanca.
Sintió un impulso de correr hacia ella, tocar su hombro solo para que diera vuelta y volver a ver sus ojos.
Casi como si hubiera leído su mente, ella se detuvo, giro lentamente para encontrarse con la mirada de Jake.
Todo se detuvo.
Al menos eso fue lo que sintió Jake.
Ella le dedico una sonrisa, una sonrisa que derrumbo toda barrera que Jake había levantado a su alrededor.
*****
¿Cómo rayos había regresado al restaurante sin darse cuenta? No lo supo, desde que se despidio de ella, por todo el camino estuvo divagando, fue una suerte que no le ocurriera nada en el camino.
Pero si ocurrio algo.
Algo cambió dentro de el, sintio un sentimiento calido y se sintió dichoso.
Tenía una sonrisa plantada en rostro que parecia imborrable.
-¿Contento de volver al trabajo?¿Eeh?.-dijo Richard en tono sarcástico.
-Por supuesto.-contestó.
Muy bien porque te espera un largo día.

Toda la tarde Richard y Jake estuvieron arreglando el lugar, y sobre todo desempolvando algunos equipos electrónicos para «presentación oficial» del nuevo entretenimiento.
Además, le presento al chef un hombre llamado James de unos 30 años que llevaba 2 años trabajando con Richard, el cual era agradable y bromista que enseguida entablo conversación con Jake:
-y un chico como tu...¿Qué hace aquí?¿No deberías estar estudiando o algo así?
Él encogió los hombros.-Por el momento sólo quiero estar haciendo esto..es todo.
****
-Quiero que estes atento a todo momento, no descuides ningún cliente.
Debes ser rápido pero a la vez ordenado y limpio.
-Claro Richard.
-Richard dejalo en paz, lo hará bien. Ahora vete o llegaras tarde a tus clases por la mañana.-intervino Sarah que estaba llegando.
Richard lo miro fijamente, pero su mirada se suaviso al ver a su madre.
-Esta bien...-le dio un beso en la mejilla.
Y se despidio de ella.
Después volvio a mirar fijamente a Jake.-Hasta Luego Jake.
-hasta luego Richard.
Tomo sus cosas y salió del local, Sarah dio un largo suspiró.-No es tu culpa.
-¿Qué?
-No hay nada de malo en ti, lo digo por lo duro y frío que parece ser...pero solo quiere que este lugar prospere...este lugar fue de primero de su padre así que...
-Sarah lo entiendo.
Me dio una pequeña sonrisa y se encamino hacia la barra.- ¿Estás listo? Hoy tu vida cambiará.