Someone Told Me (22)

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Al abrirse el ascensor , Jake Bugg salio corriendo en busca de la oficina de su hermano pero choco enseguida con alguien que esperaba el ascensor.
-Lo siento.. yo.- comenzó  a disculparse el joven.
- Ah pero si eres tu, no tienes porque disculparte.

Jake lo miro mejor, era el hombre que era compañero de negocios de Sebastián.
El señor Rogers.

-Eres el joven cantante de la fiesta de Kennedy , me da gusto verte.
-A mi igual señor pero tengo algo que hacer.

El hombre le sonrió.- No hay problema , ve.
Rogers entro al ascensor y le dio una última mirada al chico.

«Definitivamente veo algún parecido entre él y Sebastián»

El  chico reanudo su  trayecto evandiendo algunas personas en el camino hasta que finalmente llego hasta la puerta de la oficina que buscaba.
-¡Espera no puedes entrar allí!.-le grito una de las empleadas.

Ignorandola abrio la puerta.

Cuando  lo hizo vio como su hermano miraba seriamente a la persona ante él.

Mientras que de Marina salían las palabras «No es cierto»
En  el mismo instante en el que él entraba y ellos miraban hacia la puerta.

Se sintio desconcertado,  y entro lentamente.

La chica se cubrio la boca debido a la sorpresa y su semblante palideció más.
Y su fuerza de voluntad se iba por completo.

-Jake, bienvenido.- le dijo su hermano sin mirarlo.
-¿Por qué la has traído hasta aquí?.-le pregunto el joven irritado.

Sebastián enarco un ceja.- ¿Crees que la obligue? Ella vino aquí por su propia voluntad.

Marina no aguanto más , las lágrimas comenzaron a deslizarse por sus mejillas.
Una mala jugada le había hecho el destino al fijarse en el hermano de su enemigo.
aquel que le quito su hogar , sus estudios y la buena reputación de su padre,  engañandolo , robandole y tachandolo de loco.

Sus piernas finalmente le fallaron y cayo de rodillas.

-¿Qué fue lo que le hiciste Sebastián? ¡Dime!.- Jake se agacho junto ella, tratando de que le mirara.

-No le hice nada, solo le he dicho la verdad.
La relación sanguínea que tenemos tú yo.

Jake le dio una mirada entre confusa y enojada.

-Es..¿Es cierto?.-las palabras salieron de Marina, apenas audibles para el chico.

Ella le miro con ojos suplicantes, son la esperanza de que solo fuera una vil mentira de Kennedy.

El joven suspiró y le miro a los ojos.

-Si, él es mi hermano, pero no entiendo porqué...

-Ella no es lo que crees.- le interrumpio Sebastián.- solo es una mentirosa, no sabes si en verdad esas lágrimas son auténticas.

Más lágrimas.

-¡Basta!¡Deja de decir estupideces!¡No hables así de ella!

-Que no hable así de ella.-repitió su hermano.-¿Sabes quién esta detrás de todo lo que ha pasado entorno a mi?

Jake lo miro sin entender.
-¿Puedes adivinar quien es la culpable del ataque de la fiesta?
¿Quién puso en peligro Adriana?

Jake estaba perplejo

«No es posible»
«no puede ser ella»

-Fue ella, con su maldita e irracional idea de venganza con su deseo de poseer mi dinero.

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