Capítulo 10: Vértigo

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-Hola hermanito. ¿Contento con tu nueva compañera? -le dije.
-No te cachondees de mi eh. Además, Santana no es tan mala como parece. -dijo el.
-Tú piensa todo lo que tú quieras si te sientes mejor. -dije dándole una palmadita.

El suspiró.

-¿A que hora has quedado con tu amiga? -le dije riendo.

Y sonó el timbre.

-Hablando de la Reina de Roma. -dijo Finn abriendo la puerta.
-Terminemos cuanto antes Frankenteen. Ah hola Hobbit 2. -dijo Santana entrando.
-Sí, hola Santana a ti también. Os dejo parejita. -dije riendo.
-Ten cuidado con lo que dices o habrá consecuencias. -me amenazó ella.

Yo reí de nuevo y fui a casa de Blaine.

-Hola pajaritas. -dije cuando Blaine abrió la puerta.
-Hola mejor amiga, pasa anda. -dijo el.

Nos sentamos en su habitación.

-Bien, ¿escena favorita de comedia? -me preguntó el.
-La de Harley Quinn de Escuadrón Suicida. -dije.

Estuvimos practicandola hasta que la hicimos genial. Y la verdad es que fue muy gracioso.

-¿Escena favorita de horror? -le pregunté.
-Psicosis. Sí, ya lo sé, es bastante antigua, pero es perfecta. -dijo el.

En realidad a mi también me encantaba esa escena así que la hicimos bien a la primera.

-¿Escena favorita de drama? -le volví a preguntar.
-Titanic, cuando Rose y Jack están en la punta del barco con los brazos alzados. -dijo el.
-Genial, esa es fácil. -dije mientras Blaine se ponía detrás mía.

-Y por último, ¿escena romántica favorita? -me preguntó.
-Uno de los muchos besos de Él Diario de Noah. Pero... Blaine... ¿no crees que será algo inapropiado? -dije.
-No, ni mucho menos. La profesora lo pidió, la profesora lo tendrá. Y quiero que sea espontáneo. No quiero que lo preparemos. ¿De acuerdo? -dijo el.
-De acuerdo. -dije.
La verdad es que no me importaba besar a Blaine, total el era gay.
-Oye Blaine, respecto a eso... tú eres gay ¿no? -dije.
-Si... -dijo el no muy convencido aún.
-Era por si no te sentías muy a gusto con el beso. -le dije.
-Ah por eso no te preocupes. Estamos en la edad de experimentar. -dijo el.
-Bueno, es tarde debería irme ya. Nos vemos mañana pajaritas. -le dije dándole un beso en la mejilla.

Volví a casa. Abrí la puerta y me encontré a Santana.

-¡Oh Romeo! -gritaba Santana.

No se percataron de mi presencia.

-¡Julieta! -decía Finn.

Yo intentaba contener mi risa pero ver a Finn y Santana haciendo la escena de Romeo y Julieta en la escalera era para partirse el culo.

-Julieta... -dije saludandola de broma mientras yo subía a mi habitación.
-¡Cuánto tiempo llevas ahí! -me gritó Santana.
-Lo suficiente para saber que mi hermano es tu Romeo. Oh Romeo. -le dije imitandola.
-No te ofendas Santana pero mi Julieta es Rachel. -intervino Finn.
-Cállate ya cachalote. -le dijo ella.

Mi hermano ya se toma a broma sus insultos así que se rió.

Subí a mi habitación mientras ellos seguían con sus "escenitas".

Dieron las nueve de la noche cuando Santana se fue y yo cené, me puse a ver una serie un rato hasta que me acosté.

***

Sábado por la mañana. Día del paracaidismo.

-¿Preparada hermanita? -me preguntó mi hermano.
-Eh... eso creo. -le dije mientras íbamos a por Rachel.

Llegamos al lugar en el que nos recogeria el avión.

Quinn y yo llevábamos algo molestas desde que me contó lo de Sam.

-¿Lista preciosa? -me dijo Sam agarrandome de la mano.
-Sam... no estoy muy segura de querer hacer esto. -dije nerviosa.
-Créeme estás preparada. Respira hondo. -me dijo el aspirando.

Respire bien hondo como Sam me dijo y subí al avión.

El avión empezó a subir. Sam me volvió a agarrar de la mano.

Finn se levantó y se agarró a un borde.

-Bien Glee Club. ¿Sabéis por qué hacemos esto no? -dijo Finn.
Brittany levantó la mano.
-¿Si Britt? -dijo mi hermano.
-Para componer buenas canciones. -dijo Britt.
Nosotros nos quedamos sorprendidos, tanto que nos miramos entre todos. Por una vez en toda su vida, Britt había dicho algo coherente.
-Si... si Britt correcto. Bueno y ¿estáis preparados? -gritó Finn.
Todos gritaron un ¡Sí! al unísono, excepto yo. Se me escuchó a mi sola por detrás ¡Nooo!...
-Lo estás. -me dijo Blaine.
Yo le miré y sonreí.

-Ha llegado el momento chicos. Un placer haberos conocido. -dijo Kurt levantándose al igual que nosotros.
-Ni que fuéramos a morir. -dijo Mercedes.

El piloto abrió la puerta por la que debíamos saltar y nos pusimos todos en fila.

Sonó por un altavoz la voz del piloto. Es el momento de saltar. 3... 2... 1...

Y todos saltamos.

Lo cierto es que se estaba bastante a gusto ahí arriba. El cielo azul, el aire dándote en la cara, y las caras de mis amigos muertos de miedos era bastante gracioso.

Aunque habría que ver la mía también...

No sabría describir con exactitud la sensación que se sentía ahí arriba pero al llegar abajo me dio un subidón que empecé a dar saltitos por todo el descampado.

-¡Calmate Hobbit! -me dijo Santana poniéndome las manos en los hombros para que parase.
-De acuerdo de acuerdo. -dije yo riendo.
-¿Y bien? ¿A alguien se le ha venido la inspiración? -dijo Finn haciendo que todos mirasemos a Rachel. Era la mejor compositora del grupo.
-Lo cierto... es que... ¡Si! ¡Tengo una idea! ¡En cuanto llegue a casa me pondré a escribir! -gritó Rachel.
-Joder que velocidad. Te vienen las ideas así como Blaine se cambia de pajaritas. -dijo Puck.
-¡Eh! -exclamó Blaine.
-Es cierto cariño. -le dijo Kurt tocandole el hombro.

Blaine llevaba un par de días algo extraño con Kurt.
Pero Kurt no lo notaba ya que el se comportaba exactamente igual que siempre.

Mi vida siendo hermana de Finn HudsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora