¡Enamorada de un gay!

007.

-¡Por dios, Harry!, no puedes hacerme esto. NO PUEDES TIRAR A LA BASURA DIECINUEVE MALDITOS AÑOS DE AMISTAD –grite agitada, quería llorar.- ¡¡NO PUEDES, NO PUEDES, NO PUEDEEEES!!!

El me abrazo con fuerzas, y yo a él. Mis lágrimas caían a chorros, me hacía falta el aire, me hacía falta el.

-Sienna, yo lo amo. –dijo él. Y yo me separe bruscamente de él.

-No lo puedo creer, no lo puedo creer, Hazz. –Dije llorando.- ¿penes antes que amistad? –Dije irónica.- No puedo creer que cambies a tu mejor amiga de toda la puta vida, por un chico que conociste en una fiesta.

-Lo siento, Sienna. Ya he tomado una decisión, lo quiero a él en mi vida. –dijo sin titubear. Se me caía el mundo en pedazos.- lo quiero para siempre.

Sentí una presión en mi estómago.

-LEVANTA TU TRASERO DE LA PUTA CAMA, SIENNA. –grito Bonnie, en mi oído. A dios tímpano.

-Mierda, Bonnie. Me has dejado sorda. –dije tallándome los ojos. Me vengaría de esto, que lo tenga por seguro.- ¿Qué hora es?

-Son las 11:00 de la mañana, levanta tu trasero y vallamos a desayunar. –Dijo- tengo hambre y e estado esperando a que te levantes por más de dos horas, idiota.

Reí, aw me espero.

-Deja me ducho rápido. –dije pero ella negó con la cabeza. – Bonnie no iré a desayunar en este aspecto. –dije y ella se encogió de hombros.

-Cepille tu cabello mientras dormías, solo lávate la cara me tome la libertad de escogerte la ropa. Ahora muévete, porque si no tengo en 15 minutos mi desayuno no te dejare dormir durante una semana. –Me levante apresurada ya que Bonnie está loca y es capaz de cumplirlo.

Camine hasta nuestro baño y me vi en el espejo mi cabello mi cabello lucia muy bien, gracias Bo. Me lave la cara y la seque con una toalla. Al salir del baño vi la ropa que Bonnie a vía escogido para mí.

Me puse el pantalón azul algo rasgado, y la blusa negra de tirantes tome unas sandalias color café, me puse unos lentes oscuros ya que no quería asustar a nadie por el tamaño de mis ojeras, esa maldita pesadilla era mi peor miedo.

-Bien zorra, vamos a desayunar. –dijo la rubia.- podría comerme un vaca entera, vamooos.

-Esta bien, Bo. –dije y salimos de la habitación.

El camino hasta el pequeño restaurant del campus fue silencioso, algo raro ya que Bonnie es una pequeña parlanchina. Entramos al acogedor lugar y tomamos asiento aun lado de la ventana. El mesero se acerco con una gran sonrisa.

-Que se les ofrece. –dijo amable. Bonnie viro los ojos.

-Comida, Jhon a eso se viene a un restaurant. –Quise golpearme en la cara ya que Bonnie estaba siendo insoportable.

-Lo siento, Mi amiga se pone de malas cuando no desayuna temprano. –dije pidiendo disculpas por ella, Bonnie volvió a virar los ojos.

-Claro zorra, te espere por mas de dos horas. –dijo desesperada. Yo rei.- quiero dos huevos estrellados, con tosino y salchicha, pan tostado y una malteada de fresa. –dijo Bonnie.

El mesero Jhon a noto todo rápidamente y después se giro hacia mi.

-Lo mismo que ella, pero yo quiero una malteada de chocolate, por favor. –dije y el asintió. Y se marcho dejándonos solas.

-Que ni crea ese idiota que le dejaremos propina. –Dijo malhumorada.- bien que pensaste sobre lo que te dije anoche.

-Te dije que no sere tu conejillo de indias, Bo.

-Te reto, a enamorar a Harry. –Dijo Bonnie, yo solté una carcajada.

-Bo, no estoy de broma. –Ella enarco una ceja y me observo divertida.

Ella tampoco estaba de broma.

-Gallina... Cuack, Cuack, Cuack, gallina. –Dijo haciendo un baile extraño como si fuera realmente una gallina. Reí.

-Uno, las gallinas no hacen "Cuack" los patos hacen "Cuack", pequeña idiota. –Dije y ella viro los ojos- y dos él es gay, ¡vamos Bo!

-Gallina, oigan todos ¡Sienna Miller, es una gallina! –Dijo, y todos nos observaban. Gruñí-

-Está bien, está bien... lo voy a hacer, ahora retira lo que acabas de decir. –Dije y ella sonrió con autosuficiencia, santa mierda, ¿en qué me he metido?