R22

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Salí del cuarto junto a Azul. Este me dirigió por un pasillo mientras me contaba algunas cosas.
–B-bien. ¿Ya sup-piste q-que no eras la única de la raza humana?–me interroga el pequeño.
–Si, conocí a Ethan–digo esto mientras ruedo los ojos. ¿Desde cuándo sabía hacer eso?–¿es normal que quiera matarme? ¿Y qué sea tan deficiente y necio?–cuestiono a Azul.
–Bueno. N-no soy h-umaano c-como p-ara saber e-e-eso. P-peroo, de todos modos, a-aveces p-pienso lo-lo mismo–lo último lo dice con un poco de gracia, lo que me hizo sentir unos espasmos en mi abdomen; ¿Qué significa eso?
Mientras caminábamos me llevó hacia dónde me encontraba el día anterior.
Azul se despidió de mí y comencé a trabajar.

–¡ALERTA R22! REPITO: ¡ALERTA R22!– se oye un grito del cual no se puede percibir su origen.
No tenía idea de esta "Alerta R22". De pronto, algo toma mi brazo y me lleva a un cubo de metal. En cuanto se cierra la puerta me dirijo a...
¡¿Es enserio?! ¡Pero si este quiere matarme!
Me mira y suelta un bufido.
–Agh, ¿eras tú?– toma mi brazo y me saca de ahí–Espero que te coman los robots ahí.
–¿Gracias?–.
Mientras me encuentro fuera de esas paredes de metal, intento crear un plano en mi cabeza y lo construyo.
Un arma. No pude crear nada más que eso. Claro, el arma no era igual a alguna otra, pues era mi creación.
Salí escabulléndome, hasta encontrar un blanco.
Ya entendí, los robots "buenos" estaban atacando a los Fehlers. Había sentido un poco de, ¿cómo decirlo? ¿afinidad?, por lo que decidí atacar contra estos robots.
Encontré mi primer blanco, siempre lo había despreciado, el A100. Simplemente salté sobre su cabeza metálica y desde ahí le lance un disparo. Sus piezas salieron disparadas por todas partes, incluso hubieron rasguños en mi rostro.
Luego de seguir y terminar con la mitad, sentí un segundo atacando a mis rivales.
Luego unos más. No quise doblar mi cabeza. Necesitaba seguir matando, más bien, destrozando a estos robots de ataque.
Cuando todo terminó oí un fuerte "grito" detrás de mí. Todos los Fehlers se encontraban emitiendo "gritos" de guerra.
Me elevaron y comenzaron a gritar mi nombre. Esto me tomo de sorpresa, por lo que emití un pequeño grito de susto. ¿Susto?, wow.
Me bajaron y Klar me felicitó.
–Oye, gracias– Ethan habló bajo.
–¿Qué? ¿no escuché?– realmente no oí aquello.
–No me hagas repetirlo– se las pensó un poco, se volteó para marcharse, luego otra vuelta, otra– Agh, gracias. Y, perdón por echarte a la muerte– dijo en cuento se volteó hacia mí y finalmente se fue.
Levi se acercó a mí y algo extraño sucedió. Me abrazó. Después se marchó.
Quedé atónita.

"–Corre, Levi, corre que te atraparé– gritaba mientras corría detrás del pequeño riendo.
–¡A que no me alcanzas!– gritaba Levi riendo.
–¡Te atrapé, pequeño rizos!– gritó la chica al atrapar a Levi que rió aún más fuerte cuando ella le comenzó a hacer cosquillas.
Adiós, Levi."

D  I  A  N  N  EDonde viven las historias. Descúbrelo ahora