Mika

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El frío se cuela por mi rota camisa, no siento mis dedos ni cualquiera de mis extremidades, me orine encima, estoy perdido, ningun niño deberia pasar por lo que estoy pasando, mi nombre es Mika. Se preguntarán ¿Donde estoy? En una plaza, durmiendo en un banco, en pleno invierno. ¿Cómo es que estoy solo y en estas circunstancias? Digamos como que en el mundo hay gente cruel y mala, esa es la simple razón.

Veran hace seis meses mi mama fallecio, ella me dejó solo contra el cruel mundo, no se imaginan como la extraño, es mucho que afrontar, solo tengo nueve años. Cuando mamá vivía, éramos solo nosotros dos, ella hacía el desayuno y luego me llevaba a la escuela, en la tarde me recogía e ivamos por un helado o un chocolate caliente según como el tiempo estaba . Todo era perfecto hasta que Jack llego un dia a nuestro tranquilo hogar. "El es muy bueno, lo amaras" decía mamá, pero en realidad lo odio. Se emborrachaba, y nos golpeaba, pero la peor parte se la llevaba mi pobre mami. Aguanto tanto por parte de ese infeliz hasta que enfermó, ella murió y me dejo solito con el. Luego de que la enterramos Jack se deshizo de mí, me amenazó dijo que si volvía a la casa me mataria, fueron los peores días de mi vida, nunca estuve en la calle, nunca estuve solo de noche afuera a mamá no le gustaba. Luego de casi tres días de caminar y caminar, llegue a la casa de mi abuela, allí nadie me atendió. Cinco días estuve esperando afuera, las puertas y ventanas estaban cerradas de modo que no podía entrar. Mi abuela nunca vino, tambien me dejo solo. Nunca supe a quien recurrir, varias veces me he cruzado con policías, los cuales me denigraron, me trataron de indigente, ladrón, sucio. Nadie me hacía caso.

Nicolás es un chico muy simpático, el me da de comer, algunas veces me compra abrigo, solo tengo que llevar cartas a diferentes casas y el me comparte de sus cosas. Estoy tan agradecido con él, básicamente sin él hubiera muerto es la única persona que tengo.

(...)

Hoy tengo que llevarle una carta a doña Margo de parte de Nico. Voy hacia el viejo callejón donde siempre nos encontramos.

- Hola Mika ¿Como estas pequeño?

- Hola Nico! Estoy realmente bien, a pesar de que anoche hizo mucho frío..

- Me alegro campeon, mira esta vez es muy facil, ve por el mismo camino y toca dos veces el timbre de doña Margo, dejas el paquete en la puerta y recibes lo que ella te dará, luego vienes corriendo hacia aqui - Asentí, la verdad era muy facil, me encamine, una cancion que escuche por ahi se me había pegado, silbando por lo bajo fui hacia allí en la calle no había nadie y eso era raro. Llegue a la casa de Doña Margo y toque dos veces tal y como Nicolás me dijo, esta salio y me dio un sobre, inmediatamente salí corriendo hacia el viejo callejón de siempre, pero nunca llegue alli.

-NARRADOR-

El pequeño Mika, corría hacia el viejo callejón donde Nicolás y su mafia operan, el pobre no tenia ni idea de lo que en realidad eran esas "cartas", al dar vuelta la esquina algo hace que el pobre caiga al suelo, un disparo en la zona de sus pulmones. "No mandes nada, Nicolás, mataremos a tu gente, empezando por Mika, sabemos que el es importante para ti" había dicho Carlos un mafioso de la zona,  Nicolas no le hizo caso. Mientras tanto Mika cerraba sus ojitos resignado, sabía lo que estaba pasando, varios de sus  amigos murieron de la misma forma, pero dentro de todo el se encontraba bien.

 Tengo la esperanza que allá arriba me encuentre con mi mami, yo soy un ángel nunca debí venir a este cruel mundo, mami espérame voy en camino" Cerro sus ojos con la imagen de su madre, su feliz madre aquella que todas las tarde lo recogía del colegio.

EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora