Esperanza

Erick

15 de abril, Córdoba Argentina

Mamá:

Sinceramente no sé cómo empezar, quizá con un lo siento, pero no sería suficiente para expresar el miedo que tengo y lo arrepentido que estoy. Todo fue demasiado para mí, la presión y la vergüenza me abrumaron y no sabía qué hacer, estaba solo sin salida o eso creía. En realidad, frente a mi tenía miles de salidas, pero mis ojos no podían verlas.

Estoy confundido y tengo miedo de lo que pueda pasar ahora, má te pido perdón con todo de mí, y te ruego que me perdones. Nunca nadie me entendió, nunca nadie me apoyo y mucho menos las personas que yo esperaba o quería que me apoyaran. Me dieron la espalda cuando más los necesitaba ¿Qué esperabas que hiciera? No tenía a nadie. Se que fui egoísta al no pensar en ti, solo pensé en acabar con mi dolor, ese dolor que me estaba desgarrando el alma y no me dejaba vivir en paz. Te pido disculpas una vez más por no pensar en el dolor que deje en tu corazón cuando termine con el mío.

Siempre me sentí diferente y justo ahora me da rabia, tanta rabia de que tenga que ser así ¿Por qué me sentía diferente? Si yo era igual a todos, tanto física como mentalmente. Tenía altura, tenía ojos y una boca, también sabia sumar, leer podía enojarme y gritar, pero sobre todo sabia amar ¿Por qué importaba a quién? ¿Por qué importaba si yo era un hombre y me gustaba otro? ¿Por qué era tan malo querer a alguien de tu mismo sexo? No era malo, no había nada mal en mí y era eso lo que ellos no entendían.

Me hubiera encantado no ser tan cobarde y hacer algo para cambiar eso, me hubiera sentido orgulloso de haber declarado mi amor y no renunciar a él. Malditos prejuicios, solo quiero que esto deje de suceder mamá no quiero que más personas como yo se rindan tan fácilmente, ojalá algún día esta sociedad podrida se dé cuenta de una vez por todas el daño que causa. Los que discriminan y rechazan no se ponen en lugar del otro, no tienen idea de lo que se

siente o quizá sí y por eso lo hacen. Rechazar a una persona, denigrarla, hacerla sentir mal no es algo lindo de presumir ¿Quién les dio el consentimiento de sentirse superiores? ¿Por qué dicen ser normales?

Mamá avísale a la sociedad que lo normal no existe y mucho menos lo anormal. Lo diferente es lo que hace a una persona especial, así lo veo yo.

En fin, mamá espero que comprendas por que hice lo que hice y que me perdones. No podría descansar en pez sin tu perdón.

Te ama con toda su alma, Erick...