Carpe Diem Forever [El club de los poetas muertos]→ En Edición.

Capítulo VI

El profesor les señaló la estantería frente a ellos donde se encontraban las fotografías de todos los estudiantes que habían pisado alguna vez aquella academia. Lisa las observo atentamente.

Deseaba fervientemente poder ver algún día su foto puesta en aquella estantería de madera de roble, "la primera mujer en Welton". Después de todo, era la razón de todos sus esfuerzos, llegar a ser....alguien.

—¿Ven a todos estos chicos?— les preguntó el Sr. Keatting a sus estudiantes.

Asintieron con la cabeza.

—Ni yo—dijo sonriendo.

Los estudiantes lo miraron confusos.

—Pero lo que si se es que no volverán a ser los de las fotos nunca— les comentó.

—"Coged las rosas mientras podáis, pues el tiempo vuela, la flor que hoy admiraias, mañana estará muerte"— Recitó Keatting.

—Walt Withman— respondió Lisa nombrándolo en voz alta con una sutileza digna de su nombre.

El profesor ensanchó su sonrisa al escucharla.

—Exactamente, coged el tiempo, saboreadlo, aspiradlo, !Carpe diem!— exclamó con furor y luego dirigió la vista a los estudiantes.

—¿Alguien puede decirme que significa Carpe diem?— preguntó.

Cameron levantó la mano.

—Es latín, quiere decir "disfruta el momento"— contestó.

—¡Si!, ¡Carpe diem!, disfrutad el momento, no os convirtais en fantasmas como estos chicos que tenéis al frente— exclamó y luego se colocó detrás— Acercaos a ellos y tal vez podréis oír su último legado— les indicó.

"Carpe diem"

"Carpe diem"

Comenzaron a escucharse susurros.

Neil y Charlie lo vieron. Vieron como el profesor Keatting susurraba, y tuvieron que hacer un gran esfuerzo para no echarse a reír.

(.....)

Cuando la campana sonó indicando el receso todos los estudiantes se dispersaron rápidamente. Bueno, casi todos.

Neil y Lisa salieron con lentitud, uno junto al otro. El "patio" del receso era inmenso, pero decidieron sentarse sobre la hierba en una de las orillas un poco más alejadas del barullo de los jóvenes

—¿Y bien?— preguntó ella una vez que ya se habían acomodado.

—Tengo una idea, haremos el juego de las tres preguntas— dijo el castaño entusiasmado.

—¿El que de las tres que..?— exclamó la oji-azul confundida.

—El juego de las tres preguntas— repitió Neil.

—¿Y eso que es?— preguntó ella sin comprender.

—Tres preguntas por cada uno , por día— se explicó el de ojos miel con una sonrisa.

Lisa sonrió.

—Me parece bien— contestó tratando de disimular lo mucho que eso le divertía.

—Bueno, empiezo yo, ¿que hace una chica en Welton?— le preguntó Neil.

—Las calificaciones más altas— respondió restándole importancia y luego hizo un mohín — Es mejor que te esfuerzes más con tus preguntas— contestó.

—Mi turno, ¿que te gusta?— le preguntó.

—Leer, las vacaciones y el teatro. Soy muy simple, lo se— contestó riendo.

—¿A ti que te gusta?— le preguntó Lisa.

—Pues leer, las bicis, la poesía y los exteriores— contestó con simpleza.

—¿Que cosas lees?— formuló la peli-negra su última pregunta.

—Misterio y obras de comedia y drama— contestó.

—Interesante— comentó ella.

—Bueno, pues aquí va mi última pregunta, ¿cuales son tus objetivos?— preguntó.

La pregunta le cayó a Lisa como un duro golpe en el estómago. ¿Porque rayos estaba jugando a esa clase de tonterías con su compañero de clase?, le había costado demasiado llegar hasta donde había llegado como para tirarlo al caño por un par de triviales distracciones. Tenía que ser la mejor, por el...

Justo cuando se disponía a marcharse llegaron los muchachos.

—¡Chicos!, ¿a que no adivinan lo que eh encontrado?— exclamó Charlie con una sonrisa burlona dibujada en el rostro.

En sus manos, traía un anuario escolar viejo, y en el, se veía una vieja foto del profesor Keatting.

—El tío era un capullo— dijeron Knox y Charlie a la vez conteniendo la risa.

*******

Thirteen~