Recuerdo la primera vez que la vi.
Un día en aquel parque lleno de personas insoportables, con niños insoportables, viento insoportable con hojas que caían en mi pintura aún sin secarse insoportablemente, lindo todo. Por culpa del viento, y tal vez mía por no asegurarla mejor, salió volando al césped unos metros lejos de mi. Maldiciendo todo, ya que probablemente mi magnífica pintura se arruinó, una chica de cabello rojizo cobrizo largo y lacio que cubría su cara se apresuró antes y la recogió cuidadosamente del césped limpiando un poco las pequeñas ramitas que tenía aún pegadas en la pintura.
Quedé muy hipnotizado al ver sus grandes ojos rasgados. Era muy tonto en aquella época.
Recuerdo la primera cita que tuvimos.
Yo nunca había conocido a una chica que me conquistara de la manera en la que ella lo hizo. Me sentía en las nubes, su compañía lo era todo para mi, podía estar horas y horas con ella sin importar nada, ya no me sentía vacío.
La noche cayó sobre nosotros, ella dormía en mi pecho y yo veía las estrellas pensando en lo que estaba pasando. Algunos momentos parecen las pinturas más perfectas hechas por pintores no tan reconocidos con un talento merecedor de todo el reconocimiento que puedas imaginar pero nunca reciben eso.
Sólo conocen las obras, no a los creadores.
Ella conocía los momentos, no con quién los pasó.
Recuerdo su risa, su sonrisa, sus labios.
Hacer el ridículo nunca estaba en mi lista de cosas por hacer y mucho menos lo disfrutaba, pero siempre salía ese lado estúpido y realmente bromista de mi cuando ella estaba cerca, amaba verla sonreír, era de las cosas que completaban mi día a día.
Recuerdo sus besos.
Con movimientos rápidos y para nada precisos me senté en sillón de mi antigua casa, ella estaba sobre mí.
Respiraciones agitadas.
Sus besos eran mi obsesión, mi parte favorita, era el detonador de la bomba que llevaba dentro de mí.
Recuerdo sus abrazos.
7:40 p.m
El timbre hizo eco en cada pasillo de la casa. Supuse que era ella, me dejó una nota diciéndome que llegaría tarde del trabajo.
Al abrir la puerta se abalanzó sobre mí con lágrimas y gritos. Me asusté, pensé que le había ocurrido algo, que la habían despedido tal vez, se había esforzado mucho para conseguir un mejor puesto, trabajando hasta tarde, no comía bien, no dormía bien, consiguió el puesto y pensé que todo esto había acabado pero al parecer me equivoqué.
Se separó de mi con una enorme sonrisa ¿entonces no le había pasado nada malo?
"Vas a ser padre"
Las enfermeras corrían de un lado a otro atendiendo a las personas que entraban y salían de una puerta que decía "Emergencias", Jackson estaba gritando que ya había despertado, los demás entraron haciendo un escándalo al cuarto, logré ver a Yugyeom con la capucha de su sweater cubriendo parte de su cabeza, sentí un poco de dolor en la muñeca, volteé, tenía un montón de puntos.
Pensé que sólo había sido una pequeña cortada... no compraré más vasos de vidrio, supongo.
+I.J
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lost dad + i.jaebum
Cerita Pendek❀ El diario de un padre perdido。 ✧Autor; etherealflxwer -; No copy, no problem -; 2016