Hasta Contar A Mil

Capitulo 26

Tome un pan de la mesa y se lo arroje a la cabeza.

Natalya: auch!
Jessi: lo siento.

Me escondí de nuevo.

Natalya: que sorpresa... Que haces aquí.
Jos: pues he venido a verte.
Natalya: a mi? Jaja porque?
Jos: hoy tengo el día libre, me preguntaba si saldría conmigo hoy.

Rosita y yo nos miramos intrigadas.
Digo, que el chico de tus sueños y paredes te invite a salir es algo que no puedes cambiar por nada del mundo.

Natalya: salir? Hoy?
Jos: si. —sonrió.
Natalya: ha.. —ella cerro los ojos— no puedo Jos...
Jos: ha... —su sonrisa, se esfumó.
Natalya: Diego me ha invitado a Salir.
Jos: Diego?
Natalya: si...
Jos: vale, bueno... Entonces yo..

Antes de que sucediera algo mas, Diego como por arte de magia llego.
Estaba parado atrás de Jos.

Diego: Jos... que haces aquí amigo.
Jos: ha.. Yo?

Jos se miraba desanimado y parecía algo triste.
A Natalya se le rompió el corazón al verlo así.

Jos: nada... Solo pasaba a dejarle algo que olvido Nat en el auto.
Diego: que bien, porque vamos de salida.

Rosita y yo estamos mas que tensas, y queríamos llorar al ver a Jos tan incomodo y sin saber que hacer en esa situación.

Jos: vale, bueno yo me voy chicos que se diviertan.
Diego: sale bro, cuidate.
Jos: Natalya adiós... —le beso la mejilla.

Rosita y yo queríamos gritar pero no podíamos, no debíamos de arruinar el momento.
Respirabamos muy agitadas.

Jos metió sus manos en los bolsillos y se marchó.

Diego: nos vamos?
Natalya: s..si si, solo deja voy por mi bolso, su gustas pasar, ponte comodo.
Diego: gracias.

Ella corrió a la cocina.

Rosita: no mames quiero llorar.
Natalya: yo también, que podía decir.
Jessi: no se, pero se le miraba muy triste.
Rosita: como sea, solo diviertete y ya olvida esto.
Jessi: si, a Jos se le ha ido el tren y no te invito a salir primero.
Natalya: como sea... Ya me voy.

Tomo su bolso y fue a la sala.
Natalya: nos vamos?
Diego: si...

Salieron por la puerta.
Ambos reían de los chistes malos de Diego y planeaban pasarla de locos.
Diego le ayudo a subir al auto abriendo la puerta h luego subió el a la parte del piloto.
El auto dio marcha a un restaurante que estaba escondido por alguna parte de la ciudad.
Natalya: sera muy elegante?
Diego: nada del otro mundo.
Natalya: presumido.. Jajaja.
Diego: te parece que soy así? No soy un presumido jajaja.
Natalya: si lo eres.

Llegaron al lugar y entraron como una pareja, el lugar estaba con la luz algo opacas y las paredes eran color vino, las velas adornaban bien el lugar.
Había muchas personas que se miraban que tenían dinero y el restaurante era un gran complemento.

Nos sentamos y el camarero se dirigió a nosotros entregándonos las cartas.

Diego: gracias, en un momento de hablamos.

El hombre solo asintió y se retiro.

Diego: que vas a ordenar Nat?
Natalya: no lo se... Todo se ve muy costoso.

Natalya revisaba la carta y buscaba algo que fuera un poco barato, pero era como contar los granitos de la arena del mar.

Natalya: creo que nada jajaja.
Diego: jajaja vamos, estoy consciente de los precios, si no no te hubiera invitado a venir aquí.
Natalya: vale, vale, creo que la langosta, nunca he comido eso.
Diego: es deliciosa te encantará.

Diego le indico al mesero que fuera a tomarles la orden.

—estan listos para ordenar?
Diego: si... Quiero dos de estos y una langosta.
—ha si, mm para la hermosa señorita que lo acompaña no va a querer algo de beber?
Natalya: jajaja supongo que...

Ella abrió los ojos como platos. Lo miro fijamente.

Natalya: Diego ordena por mi, lo que sea vale, tengo que ir al baño.
Diego: vale...

Salio corriendo y entró al baño pero esperaba en la puerta.
El mesero se aproximaba a la cocina y ella saco la mano y lo metió al baño de damas.
Lo llevó de la corbata y lo metio en uno de los cuartitos de baño.

Natalya: que haces aquí!

Le quito el bigote y la uní ceja.

Jos: no podía dejar que salieras con Diego a solas.
Natalya: es, tan tonto Jos, Creíste que no te reconocería con tu bigote mas falso que nada y su súper ceja.
Jos: lo intente, al menos Diego no me ha reconocido.
Natalya: vete de aquí Jos...
Jos: porque?
Natalya: porque yo estoy saliendo con Diego en este momento y no me puedes cuidar de esa forma.
Jos: pero tu no quieres salir con Diego.
Natalya: como has conseguido el uniforme de aquí.
Jos: conozco a alguien.
Natalya: como sea... No sigas mas aquí.

Cuando tome la manecilla de la puerta Jos se opuso.

Natalya: que haces.
Jos: no saldrás de aquí Nat.
Natalya: Diego va a sospechar.
Jos: solo pensara que te ha dado diarrea, tu no quieres salir con el.
Natalya: que dices?
Jos: no no quieres porque me lo dicen tus ojos.
Natalya: estas loco.
Jos: Natalya, no te mientas, en este momento quisieras estar conmigo.
Natalya: estoy contigo en un baño genio.
Jos: sabes a lo que me refiero.

Ella no sabia que mas decir.
Jos la abrazo y comenzó a respirar agitadamente.

Jos: no soporto verte con el...

La puerta del baño se abrió y se escuchó una voz de hombre.
Era Diego.
Abrió el cuarto de baño y vio a jos que abrazaba a Natalya con fuerza.
Lo tomo del cuello del uniforme y seguido golpeo su rostro cayendo al suelo.

Diego: me gustaría que preparas un disfraz mejor.
Jos: a mi una cena menos aburrida.

Le devolvió el gesto.

Diego: Natalya esta aquí conmigo ahora idiota, y ya te tuve mucha paciencia, he llegado al limite contigo.
Jos: jajaja es que sabes que Natalya me prefiere a mi... —lo empujo— le encanta pasar tiempo conmigo, se divierte mas conmigo, jajaja Diego un restaurante? Enserio? No se te ocurrió algo mas aburrido.

Diego volvió a golpearlo y Jos ya tenia su la labio sangrando.
Natalya se puso frente a Diego.

Natalya: ya basta deja de golpearlo!
Diego: este no es asunto tuyo.
Natalya: pero es sobre mi.