Se levanta rápidamente de su cama con desesperación, no podía imaginar que su hijo se encontrará en su casa, ya que sabía que su pequeñito estaba en la clínica, cosa que se repitió en su cabeza varias veces --solo es parte de tu imaginación John-- y nuevamente comienza a recostarse...
Intentó cerrar sus ojos nuevamente y pum... un golpe, algo irreal, pronto comenzó a prepararse para lo peor, varias cosas pasaban por su mente en el momento en el que escuchó el golpe, pensó que se estaba enfrentando a algún hecho paranormal lo que provocó que lentamente se desplazará por los pasillos de la casa. hasta que logró poner fin a su duda, en cambio al ver lo que se encontraba en la cocina hubiera decidido no verlo.
Un pequeño y delicado juguete de porcelana que se encontraba en el centro de la habitación, algo extraño ya que este estaba sentado con la cabeza hacia el suelo y Jhon con cara de extrañeza y alzando una ceja murmura --qué rayos-- e intenta acercarse al juguete delicado de la habitación, se arrodilló y tomó al muñeco para observarlo fijamente.
Se acerca a una ventana donde pasaba desapercibido un pequeño destello de luz, que permitió poder observar algunos detalles del extraño objetó, e impresiónandose de los ojos de éste, que eran cristalinos y daban un aspecto de maldad y tristeza que dejaba la piel de gallina. No obstante comenzó a sentir una presencia a sus espaldas la cuál no podía evadir, al voltearse vió a un extraño sujetó de camiseta blanca, sudorosa por la calida noche de verano, un pantalón de buzo algo sucio y deteriorado, pero no pudo dejar pasar su rostro el cual le demostraba un perversión al sólo observarlo con atención.
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No Le Temas Al Payaso.
HorrorJohn Morgan, un hombre que tan solo buscaba venganza, pero lo que consiguió fue un fatal final de pelicula de horror.
