Mi Profesor

Capitulo 6

Las pequeñas gotas de lluvia empezaban a caer del cielo. Todo estaba tranquilo hasta el ambiente, fresco y frío.

   Saque mi paraguas de la mochila y camine hacía la entrada del instituto. Yo llegaba algo temprano de lo usual. La verdad estaba haciendo un gran esfuerzo parándome temprano.

—Hola Mariam — me dijo Lena.

   Me detuve y me gire hacia ella.
Lena al parecer no venía sola, venía con un chico más alto que ella. Y de pronto lo reconocí, era el chico que se sienta conmigo en cómputo. Nunca he podido entablar una conversación con él, me da pena.

—Hola... — dije sin terminar lo que le iba a decir.

Jaló al chico y lo puso frente a mi.

—Mira Mariam te presento a mi amigo, Cedrik.

   El chico me extendió la mano y yo se la estreche. Después de un leve apretón de manos lo solté.
Me sentía tímida ya que me guiño un ojo lo que provocó que me sonrojara.

—Chicos, tenemos que ir a clases — empezó a caminar apresurada.

Yo con las manos en los bolsillos empecé a seguirla.

—Eres mi compañera en computo, ¿no? — me sonrió.

   Es tan guapo, por fin estaba hablando con él, tampoco se me quedaba tanto su nombre pues nunca lo había escuchado.

—Sí, la verdad no se me quedaba tu nombre. Hasta apenas — se soltó a reír y también me reí.

-—¿Y cómo está eso? — me miró.

Su mirada es tan dulce que me deja helada ahora mismo.

—Pues "Cedrik" no es un nombre muy común. Eres el primero que escuchó con ese nombre — salte una banqueta.

—Tampoco había escuchado tu nombre.

Lo mire de reojo.

—¿En serio?

—Es más común Miriam que Mariam — vaya platica.

   Su codo pego en mi hombro, y hace que de nuevo me sonroje.
De un momento a otro logró sacarme una sonrisa, ya que estaba muy nerviosa.

—¿Cómo no te había hablado antes? — le dije de broma.

—Lo mismo digo — me pare para verlo, pero no me di cuenta y me tropecé. Me dolía mucho mi rodilla.

—¡Mariam cuidado! — me grito y se acercó corriendo a mí

   Apenas reaccione a sus palabras. El auto lo tenia frente a mi, de no haber frenado yo estaría en no se donde. Cedrik se sentó a mi lado.

   Estaba helada, tirada en la entrada del estacionamiento, seguía sin moverme al ver quien estaba dentro del auto.

   Abrieron la puerta del auto y de ahí bajo, Ahian.

—¿Estás bien? — me dijo Cedrik.

   Estaba en shok, la verdad no sabía que decir. Y ahí lo vi, a Ahian...

—Mariam... ¿Estás bien? — dijo Ahian detrás de Cedrik.

—Yo... Si... Sí estoy bien — sentí culpa —. ¡Uf pero que tonta fui! Esto es mi culpa.

   Vi sus ojos verme, su mirada me ponía bastante nerviosa. Tenia que seguir caminando, soy toda una tonta por no fijarme donde estaba parada. Mi día está empezando muy mal...

—¿Te pasa algo Mariam? — dijo Cedrik.

   Me ayudó a levantarme y Ahian se acercó.

—En serio, perdón Mariam — yo voltee a verlo. Sus ojos me miraban muy preocupados —. Esto es mi culpa, te lastimaste la rodilla...

—Estaré bien — no me dolía tanto, aparte no fue su culpa, fue la mía — yo fui la que no se fijo al caminar.

—Yo la llevare a enfermería profesor, no se preocupe — yo no sabía que decir... Es tan raro todo esto.

—¿Seguro? — lo miró dudando.

—Sí, para mi no es ningún problema. Usted tiene que llegar a su trabajo.

   Cedrik me jaló y se despidió de Ahian. No quería que él me acompañara, quería que fuera mi profesor.

...

—Soy una estúpida por no fijarme donde caminó — dije después de un largo rato.

—No digas eso. Estas aún confundida por lo sucedido. Solo fue un pequeño accidente — me dijo Cedrik intentando animarme.

Tal vez estaría más tranquila si no me hubiera atropellado Ahian, por qué no pudo ser otra persona, me siento tan agobiada.

   Por otra parte no debí pasar por el estacionamiento, yo nunca pasó por ahí, siempre intento evitarlo para no encontrarme a los profesores. Hoy llegaba más temprano de lo normal por lo cual nadie vio aquello. Solo Cedrik y Lena, que se había adelantado al caminar.

—Vamos chica. No me gusta verte triste — se acercó a nosotros Lena—. Desde que llegamos has estado así.

   Cedrik se nos quedó observando y decidió decirle lo sucedido hace una hora. Pero lo que me abrumaba era lo distinto que estaba siendo mi profesor, aunque eso no debería de preocuparme, porque solo es mi profesor y nada más.

...

¡Muy feliz navidad! Espero que sea de su agradó el capítulo.