10. Mi mejor amigo

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Mitch no entendía lo que sucedía el médico le había prometido que el primero en pasar sería su “esposo” y no era que no quisiera ver a Scott era lo que más ansiaba, pero el no saber que estaba pasando lo ponía extremadamente ansioso.

Scott entro a la habitación y acerco una silla para sentarse al lado de Mitch

-El doctor nos dijo que te cuesta trabajo hablar así que no te preocupes, no sabes lo preocupado que estaba- Scott empezó  a sollozar

–Pensé que te iba perder, que nunca más podría escuchar tu risa-

Mitch veía las lágrimas de Scott y quería decirle tantas cosas, pero era tan difícil poner esas palabras en su boca, sin embargo lo logró – Noooo lloress- murmuro Mitch

Scott seco sus lágrimas – Tus papas están afuera, Avi, Kevin, Kirstie y Jake todos han estado muy preocupados por ti

Si ellos eran todos los que estaban afuera quien era su esposo, pero Mitch no tardó mucho en entenderlo Scott tomo su mano y fue allí que Mitch vio el anillo, Scott tenía una argolla matrimonial puesta y aunque Mitch no veía ninguna en sus dedos era la única explicación que encontraba, el médico le había dicho que su esposo estaba muy preocupado por verlo y sería la primera persona en entrar y así sucedió el hombre con el que Mitch soñó por unos instante que fuera su esposo, ahora lo era, no sabía como pero lo era.

-Scottttieeee esposo- fue un gran esfuerzo para Mitch decirlo pero necesitaba saberlo, necesitaba que alguien aclarara lo que estaba sucediendo.

Scott no sabía que responder, que tanto recordaría Mitch de lo sucedido en Las Vegas, no quería ponerlo nervioso ni que se alterará pero no podía ocultarle las cosas por mucho tiempo.

Scott guardo silencio no encontraba las palabras sin embargo Mitch tomo la mano de Scott y acaricio el dedo donde se encontraba la argolla de matrimonio.

-Mitch no sé cómo explicarte- decía Scott un poco angustiado

Mitch lo miraba esperando la respuesta que lo haría el hombre más feliz del mundo.

-Mitchie no sé qué tanto recuerdas pero el domingo en la noche salimos de fiesta, te acuerdas de eso- preguntó Scott, y Mitch suavemente dijo si con la cabeza.

-Bueno no recuerdo mucho de lo que paso pero al parecer fuimos a varios bares y a eso de las 2 de la madrugada terminamos vestidos de blanco con varios fans en una de las capillas-

Mitch escuchaba atentamente todo lo que decía Scott no podía recordar nada de lo sucedido.

-Y un Elvis nos casó- Mitch no podía creer lo que acababa de decir Scott si estaban casados, se había casado con su mejor amigo en Las Vegas y no recordaba absolutamente nada.

-Mitchie yo no sé qué decirte, es culpa mía, borracho publique las fotos de nuestra boda en Instagram y ahora todos los saben- sollozaba Scott

Mitch quería decir tantas cosas pero le era tan difícil armar las frases, quería decirle a Scott que aunque no recordaba nada no se arrepentía de estar casado con él, Scott observaba como Mitch movía sus labios y veía lo difícil que era para el decir cualquier cosa.

-Mitch está bien no tienes que decir nada ahora, tómalo con calma- Mitch respiro profundo y empezaron a brotar lágrimas de esos hermosos ojos cafés.

-Mitchie no llores todo va a estar bien esto lo podemos arreglar seguro abra una manera de deshacer el matrimonio- Scott no pensó bien lo que dijo la verdad era que no quería separarse de Mitch pero él se veía muy angustiado con todo lo que estaba pasando.

No, eso no era lo que generaba angustia a Mitch se debía a que no podía hablar – Scott triste- murmuro Mitch

-Mitchie ya estoy mejor porque tu estas bien y eso es todo lo que importa- Scott tomó la mano de Mitch y la beso

Sin embargo escucharon un golpe en la puerta e ingreso una enfermera con una doctora

-Buenas Tardes, soy la doctora Michelle Robert y soy neumóloga voy a revisarte y empezaremos a realizar terapias respiratorias para que muy pronto no tengas que utilizar oxígeno, te parece-

Se dibujó una pequeña sonrisa en los labios de Mitch en señal de aprobación

-Qué pena pero tengo que pedirte que te retires, cuando terminemos puedes volver a ingresar- dijo la doctora mirando a Scott, sin embargo se escuchó un NO muy fuerte y con mucho esfuerzo que salió de Mitch.

-No, no, noooooo, se escuchaba suavemente las palabras salir de la boca de Mitch

-No me voy a ir, Mitch no quiere que lo deje por favor no me haga salir mire lo angustiado que esta- el monitor que controlaba la respiración y los latidos de Mitch empezó a sonar mostrando una aceleración en la respiración y el ritmo cardiaco de Mitch, la doctora no quería que Mitch se alterará así que permitió que Scott se quedará en la habitación.

Mi Mejor AmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora